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El senador Roy Barreras adujo que la aplicación "rígida" de la justicia no permite la paz en los países que enfrentan conflictos.

POLÍTICA

"Hay que ganar todo en verdad y en reparación, y algo en justicia": Roy Barreras

El presidente de la Comisión de Paz del Senado propuso la creación de un nuevo marco legal de cara a futuras desmovilizaciones. Argumenta que debe incluir a "combatientes legales".

21 de enero de 2011

Una de las preguntas que sigue sin resolverse es cómo garantizar una paz duradera e integral en Colombia, tras varias décadas de un conflicto armado cada vez más degradado.
 
La Comisión de Paz del Senado, en cabeza del senador de La U, Roy Barreras, explora nuevos caminos para lo que él llama “un ambiente propicio y un nuevo marco legal para la paz”.

En aras de lograr el “ambiente”, Barreras ha planeado reuniones con algunos dirigentes políticos para expresar sus opiniones y escuchar las propuestas que ayuden a construir una agenda.

Hasta ahora, la Comisión de Paz del Senado ha contemplado dos temas para la discusión: la posibilidad de crear un nuevo marco legal integral que sirva para combatientes ilegales “y legales” que quieran buscar la paz; y el desarrollo de la Ley de Víctimas, “sin caer en irresponsabilidades fiscales, en promesas incumplibles o en la deslegitimación de la acción del Estado”, según dijo Barreras.

Por lo pronto, el senador se ha reunido con el presidente Juan Manuel Santos, quien le dijo que hay que avanzar con “prudencia y firmeza”, pero que ve con buenos ojos la iniciativa; con el presidente de La U, Juan Lozano; y con el presidente del Partido Liberal, Rafael Pardo.

Esta mañana Pardo, en Caracol Radio, dio cuenta de los términos en que transcurrió la reunión con Barreras este jueves. Dijo: “Estuvimos hablando largamente y realmente tenemos importantes coincidencia que queremos conciliar. La paz debe comenzar por quienes han sufrido la guerra, por eso la importancia de la Ley de víctimas. Una norma que dé posibilidades a ex combatientes para tener una vida mejor, no sólo desmovilizados sino también para los soldados que estuvieron en la confrontación”.

El sacrificio de la justicia

En conversación con Semana.com, Barreras esbozó los primeros trazos de una propuesta todavía en ciernes.

Dijo que las leyes actuales, la de Justicia y Paz y la recientemente aprobada para darle un marco jurídico a la desmovilización de combatientes rasos que no estaban incluidos en el proceso, son insuficientes para desmovilizaciones futuras.

“La Ley de Justicia y Paz tiene problemas como la inoperancia, a pesar de ser modelo de justicia transicional en el mundo. Y la Ley para los desmovilizados no será suficiente para cualquier colombiano que esté pensando en apostarle a la paz, pero que en este momento esté usando las armas”, dijo.

A la pregunta sobre cuáles son los ejes infaltables de un nuevo marco legal, el senador dijo que lo primero es seguir con el proceso de reconciliación en el que la prioridad son las víctimas, pero que también hay que pensar en los victimarios, para que no se vuelvan a dar nuevas víctimas.

Barreras explicó que “hay que ganar todo en verdad y todo en reparación, y algo en justicia”. En su criterio no es posible la paz con la aplicación de justicia a “rajatabla”, si no hay un costo para la justicia.

Pero tampoco es posible la paz con leyes de perdón y olvido como las que se aplicaron en el Cono Sur para superar las dictaduras. “no podemos enviarle el mensaje equivocado a las bandas criminales de que el Estado se ha debilitado, todo lo contrario deben saber que está firme”, advirtió.

Agregó que un nuevo marco legal debía incluir a “combatientes legales” refiriéndose a integrantes de la fuerza pública. No obstante, a la pregunta si a cambio de la verdad, por ejemplo, se le podía ofrecer una rebaja de penas a un militar incurso en un delito de guerra, prefirió no aventurar una respuesta.

“Debe ser en el marco de la justicia transicional”, afirmó, que es la que se ha utilizado como marco de referencia en países en conflicto que han pasado de dictaduras, o guerras civiles, a democracias.

El tema es espinoso, pues en ese objetivo han trabajado ciudadanos de todos los sectores en Colombia, en coyunturas distintas, y sin embargo la paz sigue renuente.