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Héctor Zambrano | Foto: SEMANA.

JUDICIAL

“Iván Moreno era el que mandaba en la cárcel”

En una audiencia de aceptación de cargos, la defensa de Héctor Zambrano reveló las presiones que soportó por parte del exsenador.

27 de enero de 2014

Luego de oíar a cada una de las partes en el proceso contra el exsecretario de Salud de Bogotá Héctor Zambrano, la juez 16 penal del circuito con funciones de conocimiento de Bogotá estimó pertinente suspender la diligencia hasta el próximo 14 de marzo, en la cual dará a conocer la condena contra el exfuncionario por su participación en el denominado ‘carrusel de contratos’ en Bogotá.

Zambrano aceptó cargos por los delitos de cohecho propio, interés indebido en la celebración de contratos y contratos sin cumplimiento de requisitos legales, conductas que se dieron en torno al polémico contrato de ambulancias.

El exsecretario desde el momento en que se le imputaron cargos, en marzo del 2013, se ha convertido en uno de los testigos claves del ente acusador, para llegar al fondo de la corrupción que afectó al Distrito durante el mandato del exalcalde Samuel Moreno.

Este lunes el fiscal auxiliar ante la Corte Suprema de Justicia Juan Vicente Valbuena resaltó el hecho de que Zambrano aceptara cargos, le ahorrara un juicio a la administración de justicia con su allanamiento y además colaborara con la investigación que actualmente adelantan por los hechos que rodean el ‘carrusel’. Además pidió que se le diera una rebaja de hasta la mitad de la pena por considerar que el exsecretario no se allanó a cargos desde la imputación por un supuesto constreñimiento.

Pedro Nel Escorcia, defensor del exsecretario, resaltó ante la juez la “intachable” hoja de vida de su representado, de la cual dijo que no tiene antecedentes penales, fiscales o disciplinarios. A todo añadió cada uno de los títulos y menciones que ha tenido a lo largo de su carrera.

El abogado también denunció que su cliente fue sometido a todo tipo de presiones para que no colaborara con las autoridades. Aseguró que lo vigilaban permanentemente, por lo que no pudo aceptar su responsabilidad desde cuando se le endilgaron los cargos.

“Fue sometido a la peores presiones y tres personas lo cuidaban y lo ponían a dormir en el piso. Pusimos en conocimiento de eso a la dirección del INPEC. Lo dejaban salir de esa celda cuando Iván Moreno lo iba a coaccionar. Le decía que él era el que mandaba en su cárcel y que ‘cuidado iba a hablar’. Al ver que el INPEC no solucionaba nada tuvimos que interponer una tutela para que pudiera expresarse”, aseguró.

También explicó que, luego  de que lo cambiaron de patio y se sentía más seguro, decidió contarle todo a la
Fiscalía.

Escorcia aseguró que Zambrano está comprometido además de colaborar con la justicia a resarcir el daño causado por su mal proceder desde la Secretaría de Salud del Distrito. Dijo que gracias a la colaboración de su cliente, se han fortalecido y abierto procesos, entre otros los de Emilio Tapia, Antonio Sanguino, Orlando Parada, Mario Solano, Henry Anaya y Enrique Mora.
 
El representante de la Procuraduría, Miguel Antonio Carvajal, se opuso a que se le entregara la rebaja de hasta la mitad de la pena, dado que sólo aceptó cargos mucho después de la imputación y nunca puso en conocimiento las supuestas intimidaciones por las que presuntamente no se allanó a cargos.

“No se ha demostrado que en el momento de verificar la diligencia de imputación se hubiese hecho algún tipo de presión contra el señor Zambrano. Y si así ocurrió, la defensa debió ponerlo en conocimiento, pero nada se dijo".  El delegado del Ministerio Público aseguró que, extrañamente, se está suprimiendo tanto por la Fiscalía como la defensa, la posición distinguida que Zambrano tenía en el momento de cometer los delitos.

“Les pedí perdón a Dios y a mi familia”

Zambrano en su defensa dijo que sabe que cometió un error y que su hoja de vida demuestra la forma como obró. “Espero es que esta situación sirva para que el país cambie la forma de hacer política y la forma como se coacciona cuando se llega a esta esfera”, dijo.

Manifestó que aceptó el delito de contratos sin cumplimento de requisitos legales porque no quería afrontar un juicio que se iba a dar por más de tres años. “A Dios le pido perdón y a mi familia. A esta ciudad le entregué más de 25 años de trabajo en el servicio público. Acepté el cargo porque si no, era un proceso de tres años de juicio y no quedaba con que pagar un abogado, cometí el error de aceptarle a Iván Moreno, a Samuel Moreno y a Emilio Tapia una comisión y entregarla (…) construí mi patrimonio con 25 años de trabajo. No estamos llenos de plata como dicen”, aseguró.   

Según la Fiscalía, Zambrano habría recibido una comisión de manera irregular por un valor de 5.000 millones de pesos, de los cuales le entregó a Emilio Tapia 2.700 millones.