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Fabio Andrés Salamanca | Foto: Archivo SEMANA

JUSTICIA

Hoy se define la suerte de Fabio Salamanca

En las próximas horas, un juez de conocimiento definirá si el conductor que, ebrio, mató a dos ingenieras, es enviado a prisión.

20 de agosto de 2013

Un nuevo giro tendrá este martes el proceso contra Fabio Salamanca, el conductor de 23 años que hace ya más de un mes, alicorado, embistió con su vehículo a un taxi y mató a dos ingenieras y dejó seriamente herido al conductor.

En segunda instancia, un juez de conocimiento definirá si lo deja en libertad, luego de que la Fiscalía insistió ante la justicia en que él sí representa un peligro para la sociedad. El presunto causante de la calamidad iba al volante con grado 3 de alcoholemia (el máximo) y se estima que viajaba a unos 140 kilómetros por hora.

Desde el 30 de julio pasado, cuando una juez de control de garantías lo dejó libre bajo la consideración de que no representa riesgo alguno, sus abogados han buscado por todos los medios acordar una indemnización con las familias de las víctimas.

Pese a que uno los defensores del joven indicó que todo estaba listo para realizar un pago de entre 800 y 1.000 millones de pesos, las familias de Ana Torres y Diana Bastidas -las mujeres fallecidas-, al igual que Holman Cangrejo -el taxista herido seriamente en el choque-, aseguran que no ha habido arreglo alguno, aunque no niegan los acercamientos.

Salamanca ya tuvo audiencia de imputación de cargos en la que se le señaló de ser responsable de homicidio con dolo eventual y lesiones personales. En los días que lleva libre dio declaraciones a los medios en las que él manifestó su arrepentimiento y pidió perdón por el daño que causó, no sólo a las familias de las víctimas, sino a su propio hogar.

Hace cuatro días, tras un mes de ocurrida la tragedia -ocurrida en la calle 26 con carrera 30 de la capital del país-, la Secretaría de Movilidad suspendió por diez años la licencia de conducción del infractor.

Por otra parte, pese a las consideraciones de los jueces, continúa el debate sobre la libertad de la que goza Salamanca ante las graves las conductas que se le imputan, que en otros casos similares han dado lugar al encierro preventivo del presunto responsable en un establecimiento carcelario.

Y, desde luego, no falta quien recuerde la posición acomodada de la familia del joven, dueños de una mediana fábrica de zapatos en el barrio Restrepo, en el sur de Bogotá, y su supuesta influencia en aquella decisión.

Este caso ha conmocionado a la sociedad, pero aún no se ven efectos prácticos. Las policías de Tránsito y Transporte han incrementado sus operativos y cada fin de semana, desde el día de los hechos, reportan centenares de conductores ebrios en todo el país. El drama de los implicados de este polémico caso parece que aún no escarmienta a los infractores.