“No se puede confundir el desescalamiento con un cese el fuego bilateral”

Horas después de que los garantes del proceso de paz anunciaron un acuerdo para desescalar el conflicto armado y acelerar los diálogos, los jefes del equipo negociador del Gobierno ampliaron, este lunes, los detalles del histórico anuncio que dieron las partes en busca de un cese bilateral definitivo.

"El desescalamiento no se puede confundir con el cese el fuego bilateral", dijo este lunes el jefe del equipo negociador, Humberto de la Calle, quien al igual que el alto comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, fue enfático en advertir que se trata de una medida que busca bajar la intensidad del conflicto, además de generar confianza entre los colombianos.

En su intervención, los jefes del equipo negociador desmintieron que el Gobierno haya acordado un cese bilateral "prematuro y chambón", y dijeron que, por el contrario, se trata de un acuerdo que les dará un nuevo ritmo a las negociaciones que por casi tres años han adelantado en La Habana. En ese sentido, advirtieron que en esencia ahora las conversaciones se van a regir por temas, más que por ciclos de 11 días como lo venían haciendo.

Aunque se trata de la primera vez que el Gobierno acepta reducir las operaciones contra las FARC desde cuando inició el proceso, el presidente advirtió que su continuidad quedó supeditada a que la guerrilla cumpla en los próximos días el acuerdo alcanzado en Cuba. 

Igual a como lo plantearon los representantes de los países garantes y el presidente, Humberto de la Calle y Sergio Jaramillo reiteraron que ambas partes solicitaron el "acompañamiento" de un delegado del secretario general de la ONU y un representante de la presidencia de Unasur (actualmente ejercida por Uruguay), para que contribuyan "a poner en marcha la discusión sobre el sistema de monitoreo y verificación" del eventual cese al fuego.

Pese a que uno de los puntos que más ha inquietado a los colombianos es la posición en la que quedan las fuerzas militares, De la Calle dijo enfáticamente que seguirán trabajando como lo vienen haciendo. "No habrá un acuartelamiento de policías y militares. Las fuerzas militares seguirán operando contra todas las modalidades delictivas", dijo.