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Uno de los grandes problemas en varios municipios de Atlántico, es que no tienen agua potable durante todo el día. | Foto: Foto: Archivo Semana

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ICBF en la tarea de acabar con alimentos contaminados

Un informe reveló que 33 instituciones de Atlántico brindaban comida con hongos y coliformes fecales. Se iniciaron inspecciones para acabar con esa situación.

17 de julio de 2015

Un estudio del ICBF y la secretaría de salud de Atlántico hizo una revelación preocupante esta semana: los niños de 19 municipios de este departamento consumen alimentos con hongos o coliformes fecales.

Las conclusiones de esta evaluación -hecha en abril- resultaron escandalosas. Pues de las 78 muestras microbiológicas tomadas a distintos tipos de alimentos de 33 instituciones, sólo 11 salieron aceptables y cumplieron todas las condiciones de salubridad.

Fue así como Karen Abudinén, directora de Primera Infancia del ICBF, habló con Semana.com y aseguró que la institución haría todo lo posible por acabar con la situación y abrirían procesos administrativos contra los proveedores de alimentos que no cumplan con las buenas prácticas de manufactura.

La promesa de verificar los procesos, se cumplió. Tal como lo anticipó a Semana.com, desde el miércoles hasta este viernes un grupo de siete personas de la dirección de Primera Infancia fueron a Atlántico a realizar controles para ver si la situación seguía igual.

El equipo, conformado por cuatro nutricionistas, un psicólogo, un ingeniero industrial y Karen Abudinén, visitaron varios municipios, como Malambo, Santo Tomás, Sabanalarga, Repelón, Soledad y Candelaria.

Las sorpresas fueron muchas. Según la funcionaria, los alimentos que usan en las instituciones educativas de estos municipios son de “mejores marcas” y están siendo mejor empacados y servidos.  

Los funcionarios verificaron que todos los operarios que cocinan, proveen o transportan los alimentos en esos municipios, tuvieran el respectivo carnet de manipulación y los exámenes que exigen las autoridades de salud.

“Sin embargo, todavía hay una deficiencia en manipulación y organización de los alimentos. Así como también se deben mejorar las condiciones higiénicas en las que son transportados”, explicó Karen.

El equipo del ICBF también se dio cuenta de que uno de los grandes problemas en varios municipios de Atlántico, es que no tienen agua potable durante todo el día, lo que conlleva a que los alimentos se puedan contaminar más fácilmente.

Como falta mucho por mejorar, la vigilancia del ICBF será constante. El equipo estuvo hasta este viernes 17 de julio visitando cada uno de los municipios de Atlántico que salieron mal en la evaluación. El próximo martes entregarán, junto a la Defensoría del Pueblo, los resultados completos de lo que se encontraron.

“Algo es claro, operador que no cumpla con las condiciones, será sancionado o multado”, puntualizó Abudinén.