Jaque a la reina

Valerie Domínguez creyó, cuando fue escogida reina nacional de la belleza, que había empezado un cuento de hadas. El mismo que luego se prolongó con su ascenso estelar como actriz reconocida por todos los colombianos. Hoy, sin embargo, su vida parece más una película de terror.

El jueves pasado, la Fiscalía la acusó formalmente por los delitos de falsedad en documento privado y peculado por apropiación en modalidad tentativa. Ese mismo día, la exseñorita Colombia se enteró de que su exnovio, el comisionista de bolsa Juan Manuel Dávila Fernández de Soto, sus exsuegros y su excuñada actuarán como testigos en el juicio previsto para el 8 de septiembre. Sin embargo, según Juan Carlos Frías, el abogado de los Dávila, "no hay un acuerdo con la Fiscalía para declarar ni a favor ni en contra de Valerie. Ellos simplemente van a decir la verdad de cómo ocurrió todo y contestarán las inquietudes que ese organismo quiera aclarar".

Como su personaje protagónico en la serie Los caballeros las prefieren brutas, Valerie ha dicho que su exnovio la engañó por ingenua. Según ella, Juan Manuel le pidió que lo ayudara a conseguir un crédito que estaba entregando el gobierno para salvar los cultivos de palma africana de su finca. La actriz le dijo que no, pero como a él se lo habían negado, le siguió insistiendo. "Un día llegó su conductor e interrumpió una grabación que tenía, y me dijo: 'Don Juan le envía estos papeles para que por favor se los firme'. Luego, me lo pasó al teléfono y me dijo: 'Por fa, mi amor, ayúdame, no me vas a dejar morir la palma'. Y yo le dije: 'Listo, listo, ya te lo firmo'", contó Valerie a La W, a principios de junio.

Con el subsidio por 306 millones de pesos, su novio pretendía implementar un sistema de riego y drenaje en la hacienda La Faena, del municipio de Algarrobo, en Magdalena, de la cual ella aparecía como arrendataria. El día que le aprobaron el crédito, él, feliz, la llamó a contarle la noticia. Pero poco después, en octubre de 2009, cuando la revista Cambio destapó el escándalo de Agro Ingreso Seguro (AIS), la pareja acabó sus cuatro años de relación y, con ello, sus planes de llegar al altar.

Desde entonces, Juan Manuel le aseguró que iba a ayudarla a limpiar su nombre. "Él me dijo: 'No te preocupes, yo te voy sacar de esto. Nunca medí las consecuencias de lo que te hice firmar. Perdóname, Vali, yo voy a contar la verdad, que yo soy el responsable de todo esto'. Pero a la fecha, él no ha contado nada". A finales de junio pasado, los Dávila empezaron a negociar un preacuerdo con la Fiscalía, que, de ser avalado, les significaría un proceso expedito y una condena no superior a tres años. Como Valerie no aceptó los cargos, su proceso seguirá en etapa de juicio.

Entre los procesados por AIS, la exreina es la única acusada para la que no se ha pedido detención, pues a pesar de que resultó beneficiaria del subsidio, renunció al mismo y nunca recibió la plata. Aunque no se consumó el delito, el jefe de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía, Martín Moreno, aseguró en la audiencia que la actriz pretendía "apoderarse de dineros del Estado" cuando sus actividades no se desarrollaban en el sector agropecuario. Lo que se viene es el juicio oral y allí se verá si Valerie tiene que vivir un capítulo complicado de la vida real: el testimonio de su ex en contra suya.