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Escándalo

“Él enloqueció, no paraba de darme golpes”

Juanita Aguilar, fue víctima de una brutal golpiza por parte de su pareja, un alto directivo de una comisionista de bolsa.

8 de febrero de 2014

Un nuevo caso de violencia intrafamiliar llegó a hasta los estrados judiciales. En esta oportunidad, el episodio compromete a Sergio Ortiz, gerente de renta variable de una de las corredoras de bolsa más reconocidas del país, en donde cientos de personas ponen sus capitales en portafolios de inversión.
El empresario fue presentado ante un juez de garantías señalado del delito de violencia intrafamiliar después que su compañera sentimental denunciara el atropello al que fue sometida.

El juez dejó en libertad al ejecutivo mientras que la víctima y su abogado apelaron la decisión. Se trata de Juanita Aguilar quien relató a Semana.com lo que ocurrió. Señala que el jueves seis de febrero, llegó las 7:00 de la noche a su casa donde vive Ortiz hace un año y medio aproximadamente. Dice que vio a su pareja en un alto estado de embriaguez y le recordó que tenían que asistir a una asamblea de propietarios.

Al ver la negativa de su pareja, la víctima decidió acostarse a dormir cuando de repente señala que Ortiz perdió el control y comenzó a agredirla físicamente “él se enloqueció, no paraba de darme golpes, me agarró de los hombros, lo empujo y lo apartó de mí. Por su estado de embriaguez creo que se cae, me lanza al piso y me agarra a patadas y puños contra la pared", señaló a Semana.com.

En medio de la agresión la señora Aguilar gritó desesperadamente en busca de la ayuda de algún vecino, pero nadie apareció. Sin embargo, relata que pudo escapar y llamó al 112 a dar aviso a las autoridades.


La víctima aseguró que “el día del ataque Ortiz le dijo que no se arrepentía de nada, que lo volvería a hacer, que no tenía remordimientos y que solamente se había defendido”.

La audiencia de imputación de cargos se realizó este sábado a las 8:30 de la mañana y allí el fiscal 305 local de la URI de Usaquén, Giovanni Garzón, le imputó a Ortiz el delito de violencia intrafamiliar. Lo curioso del caso fue que no solicitó medida de aseguramiento al señalar que no tenía antecedentes penales, por lo cual quedó en libertad.

La Procuraduría no hizo presencia en la audiencia, por lo que las víctimas fueron las únicas que apelaron la decisión, al considerar que podría volver a agredir a Juanita.

A la salida de la audiencia la víctima señaló que no busca ninguna reparación económica, sólo busca justicia.“Me siento indignada, adolorida, humillada, impotente, frustrada de pensar de que una mujer no tiene protección en este país. Yo no quiero que esto les pase a las demás mujeres. Yo quiero que el pague y vaya a la cárcel”, señalo Juanita Aguilar.