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Condenan a tres personas por secuestro de diputados del Valle del Cauca. | Foto: Archivo Semana

CASO

La condena a los secuestradores de los diputados del Valle

Tres personas fueron sentenciadas a penas entre 10 y 46 años de cárcel por el secuestro de los miembros de la Asamblea.

2 de julio de 2014

Doce años después del secuestro de los diputados del Valle del Cauca, entre los cuales estaba Sigifredo López, la justicia condenó a tres de los implicados en el hecho. Un juez penal del circuito especializado de Cali los condenó a penas entre 10 y 46 años de cárcel.

La determinación cobijó a Orlando Burbano Gómez, quien deberá purgar 46 años de prisión. La Fiscalía lo procesó por el delito de homicidio agravado en concurso homogéneo y toma de rehenes. También fue sentenciado a 35 años de detención Ciro Antonio Escalante Jaimes, alias ‘Sebastián’, jefe del grupo de guerrilleros que custodió a los secuestrados. Fue sindicado de las conductas de homicidio agravado y toma de rehenes.

El fallo también afectó a Yenny Suleidi Córdoba Muñoz por del delito de toma de rehenes. La mujer deberá purgar 10 años de prisión, como cómplice del secuestro que terminó con la muerte de todos los diputados, menos López. 

La tragedia de los diputados del Valle empezó el 11 de abril del 2002, cuando un comando de guerrilleros de las FARC (Los frentes 30, Manuel Cepeda Vargas y la columna móvil Arturo Ruiz) secuestró a 12 de ellos que se encontraban en el recinto de la asamblea, en pleno centro de Cali. 

Ese día, además de López, fueron secuestrados Francisco Javier Giraldo, Ramiro Echeverry Sánchez, Carlos Alberto Charry, Juan Carlos Narváez Reyes, Héctor Fabio Arizmendi, Carlos Alberto Barragán, Nacianceno Orozco Grisales, Jairo Javier Hoyos Salcedo, Alberto Quintero Herrera, Edison Pérez Núñez y Rufino Varela. 

Pero el 18 de junio del 2007, 11 de los 12 diputados en cautiverio fueron asesinados por guerrilleros del frente 30 de las FARC, en zona rural de Nariño. La Cruz Roja exhumó los cuerpos que estaban en una fosa común cerca al río Patía entre los municipios de Cumbitara y Policarpa, en Nariño.

Cinco días después y en un acto de cinismo, las FARC oficializaron la muerte de los 11 asambleístas en su poder, argumentando que se produjo en medio de combates con el Ejército. Pero el dictamen de Medicina Legal determinó que los asambleístas fueron masacrados con impactos de fusil a corta distancia y en completa indefensión.

Los tres condenados se encuentran actualmente detenidos en la cárcel de Villahermosa de Cali, luego que el CTI de la Fiscalía y el Ejército los capturaran en noviembre del 2010.