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El exsenador del Polo Jaime Dussán (izq) y el senador Jorge Guevara (Progresistas). | Foto: SEMANA.

POLÍTICA

La dura pelea que Progresistas le ganó al Polo

Niegan tutela con la que Jaime Dussán buscaba la curul del senador Jorge Guevara.

13 de junio de 2013

El Tribunal Administrativo de Cundinamarca le puso fin a una de las más fuertes peleas jurídicas que tenían enfrentados a dos sectores de la izquierda: el Polo Democrático y los Progresistas de Gustavo Petro.

Jaime Dussán, expresidente del Polo Democrático, interpuso una tutela para que, por vía judicial, el Tribunal de Cundinamarca obligara al presidente del Congreso a despojar de su curul al senador Jorge Guevara por haberse declarado en disidencia del Polo y representar en el Congreso al movimiento Progresistas, a pesar de que había sido el Polo Democrático quien avaló su candidatura al Senado en el 2010.

Como pruebas de su reclamo, el Polo advirtió que Guevara desde el año 2012 asumió la vocería en el Congreso del movimiento Progresistas y que estaría incurriendo en doble militancia al ocupar una curul “obtenida como resultado de los esfuerzos colectivos del Polo y no del esfuerzo individual de Guevara”. Por eso el Polo reclamaba que la curul de Guevara, que obtuvo 41.214 votos la debía ocupar Dussán, quien sacó 26.708 votos y no alcanzó un puesto en el Senado.

Luego de que Guevara asumió la vocería de Progresistas, el Polo Democrático declaró “ineficaz” la afiliación de Guevara al partido y con esa decisión interna demostraba que el vocero de Progresistas no representa los intereses del partido.

Sin embargo, el Tribunal de Cundinamarca le negó las pretensiones al Polo y decidió que Guevara debía continuar una de las curules conquistadas por el Polo, a pesar de representar a otro movimiento divergente.

Entre las razones para tomar esta decisión el Tribunal aseguró que como Guevara no ha renunciado al Polo, aún pertenece al movimiento a pesar de haber declarado “sus divergencias sustanciales” frente a algunas posturas ideológicas del partido. En ese sentido, el tribunal defendió el derecho a los disensos internos dentro de los movimientos políticos.

El Tribunal de Cundinamarca también consideró que Guevara no está incurriendo en doble militancia por declararse vocero de Progresistas. La razón, la doble militancia se produce si 12 meses antes de las nuevas elecciones determinado senador anuncia su candidatura al mismo cargo por otro partido, cosa que no se ha producido.

Y también señala que como el Polo Democrático presentó una lista de candidatos con voto preferente en el 2010, por lo que reconoció que Guevara obtuvo “también con esfuerzo propio la votación que le permitió obtener una de las ocho curules del Polo. “Los 41.214 ciudadanos que eligieron al senador Guevara, en ejercicio de su derecho a elegir y ser elegido, merecen la garantía jurídica de que su mandato expresado en el sufragio no será desconocido por una actuación que no esté rodeada de legalidad”.

Concluye el tribunal que “al no haber existido renuncia por parte de Jorge Guevara al Polo, ni estar incluida en la Constitución la doble militancia como causal de pérdida de investidura, no se le puede exigir que deje su curul como senador, pues el acto mediante el cual el Polo tiene por ineficaz y nula la afiliación de su senador no tiene la potestad de generar tal efecto jurídico”.

Aunque esta decisión sólo comprometía al único partido político en oposición al gobierno de Juan Manuel Santos, casi todos los partidos estaban pendientes de este fallo.

Porque de haberse admitido esta tutela, a partidos como La U y los Conservadores, en los cuales hay congresistas más afines al pensamiento de Álvaro Uribe, o el Partido Verde, donde están el senador Jhon Sudarsky y a la representante a la Cámara Ángela Robledo en abierta disidencia, les habría bastado para declarar nula e ineficaz la militancia de los congresistas disidentes para apoderarse de sus curules. Con este fallo los disidentes de los partidos pueden garantizar sus curules.