¡La Madre Laura se apareció en Chocó!

Los humildes habitantes del barrio Camellón de Nóvita, uno de los municipios más pobres del Chocó, se sienten unos privilegiados. Por eso, se arrodillan, se persignan y miran al cielo para agradecer su fortuna. Están convencidos de que la Madre Laura vino a compartir con ellos.

Según su testimonio, la Madre Laura, quien hace poco más de dos meses fue proclamada como la primera santa colombiana, ha emergido del piso de cemento de la casa de un político local en la cual vive junto a su esposa y sus seis hijos.

Uno de ellos, mientras realizaba sus deberes escolares, fue quien descubrió la imagen de la también beata antioqueña dibujada por la arena que entra a la vivienda de ladrillo. De inmediato sus padres dieron fe del hecho sobrenatural que acto seguido proclamaron por toda la comunidad. 

Al poco tiempo, todo tipo de creyentes acudían al lugar para comprobar con sus propios ojos la naturaleza del milagro que florecía entre todos los presentes. 

Para confirmar la autenticidad de la imagen, el dueño de la residencia, un exconcejal de la localidad, decidió tomar una foto con su teléfono celular y enviarla por el mismo al sacerdote de la zona, quien al momento de lo que allí llaman aparición se encontraba en una misión en Medellín.

El padre la observó detenidamente y tras unos minutos respondió a través de un mensaje de texto. Para el religioso no hay dudas: efectivamente, se trataba del retorno de la madre Laura a tierras chocoanas, donde en vida hizo una excursión que marcó su vocación de evangelizar a los indígenas. 

Desde entonces la morada del barrio Camellón, donde el denominador común son los techos de zinc y paredes rudimentarias, se ha convertido en una romería en donde los rosarios y las velas de diferentes colores ambientan la imagen en medio.

Sin embargo, no faltan los escépticos y los maledicentes. Así, por ejemplo, hay quienes desde fuera dicen que es extraño que preciso se haya aparecido en la casa de un político. Otros, menos severos, creen que todo es producto de la fantasía religiosa de muchos creyentes que ven en una simple imagen el retorno de una santa. 

A los habitantes del pueblo, estos comentarios los tienen sin cuidado. Hasta ahora era un pueblo dejado a la mano de Dios, pobre y sin esperanza. Hoy se sienten unos privilegiados.