La página web con la que Víctor Maldonado busca lavar su imagen

La familia de Víctor Maldonado dice que se cansó de la mala prensa en contra del empresario y del protagonismo exagerado que se le ha dado por el escándalo de Interbolsa y el Fondo Premium. Como se sabe, él se encuentra en una cárcel en España tratando de evitar ser extraditado al país, donde le espera un complejo proceso penal por la responsabilidad que las autoridades le han atribuido en la captación que se configuró en el Fondo Premium y que él niega, pues sólo se considera un deudor más.

La verdad es que sobre Víctor Maldonado Rodríguez se ha dicho de todo. Que se cayó del pedestal, que es el cerebro de la caída de Interbolsa, que con sus socios en este grupo financiero engañó a muchos inversionistas, que en su vida de empresario apostó y varias veces ganó pero otras perdió, que es ambicioso, que le gusta la buena vida y el lujo, que es terco, en fin, muchas otras cosas.

Por eso su familia decidió lavar su imagen, ya que él desde la celda en que se encuentra en Madrid está prácticamente incomunicado. Al mejor estilo del mundo de la farándula, la familia creó una página web, donde dicen publicarán toda su verdad en el caso de Interbolsa, de Premium y de la vida de Víctor Maldonado y de sus empresas.

La página, que acaba de ser lanzada, se llama Víctor Maldonado Rodríguez. Al consultarla aparecen pestañas donde se lee por qué la familia decidió contar su versión de los hechos. Señalan que hoy tiene 70 años y que está enfermo y cuentan cómo fueron sus primeros años de empresario.

Hay un espacio para hablar del proceso actualmente en curso y dicen, por ejemplo, que “señores como Juan Carlos Ortiz pretenden seguir dilatando en Colombia las audiencias al no asistir a las mismas y posponerlas”.

La familia también se ocupa de desvirtuar lo que ellos consideran mitos que se han dicho sobre la participación de Víctor en este complejo caso. Aunque señalan que desde hace más de dos años puso la cara y está buscando soluciones para los afectados, otra cosa dicen las autoridades, que por ahora no ven un compromiso real de resarcir a las víctimas.