La plataforma de Pardo

En el corto discurso que dio ante el Consejo Programático del Partido Liberal, hace poco más de una semana, Rafael Pardo pronunció más de 30 veces las palabras "igualdad de oportunidades", y con ellas abrió y cerró su intervención: "Mi visión de país busca construir una ruta de felicidad y esta sólo es posible con calidad de vida para todos, respeto a los derechos individuales e igualdad de oportunidades", dijo. Y es que el tema de la igualdad es el eje central de su propuesta y alrededor del cual viene trabajando desde hace casi un año su equipo de asesores. "Esa es una de sus grandes obsesiones", asegura Carolina Fierro, coordinadora programática de la campaña y encargada de recoger los aportes de diferentes colaboradores que vienen de distintas orillas. Algunos de ellos son investigadores; otros han tenido experiencias en el sector público; la mayoría son jóvenes y, según Pardo, "tienen un perfil más técnico que político".

En la medida en que los temas de igualdad y calidad de vida están ligados a aspectos económicos, varios de los miembros del equipo son expertos en ellos. Así, al frente de buena parte de la construcción del programa están dos economistas uniandinos: María Angélica Arbeláez y Mauricio Olivera, investigadores asociados de Fedesarrollo y quienes han sido consultores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial, entre otros. Ellos han hecho los principales aportes a la propuesta temática de empleo, una de las que más páginas ocupa en el borrador del programa. Según Pardo, "existe un problema de informalidad y desempleo caracterizado por la existencia de dos mercados, uno para gente con alto nivel de calificación en el que los salarios son elevados y el desempleo bajo, y otro para gente de baja calificación con alto desempleo". Y entre las soluciones que plantea a la falta de trabajo para los menos favorecidos, el equipo incluye un plan de acción en los sectores de infraestructura, agro y comercio internacional.

En infraestructura, plantea concluir los proyectos actuales y dejar un programa financiado hasta 2014 que implique alto contenido de mano de obra, nuevos sistemas de contratación y veeduría ciudadana a los mismos. En comercio internacional, lograr que el Estado asuma su capacidad de negociación, de la cual "hoy tienen casi exclusivamente los gremios" y avanzar en tratados de libre comercio con Canadá y Europa, así como en acuerdos con China, India, países del Caribe y Centroamérica.

Y en políticas para el agro, darle un gran impulso al campo como promotor de exportaciones, diseñar un plan alimentario que garantice el consumo doméstico, proveer servicios básicos para la población rural y crear empleos suplementarios en cabeceras municipales, entre otros. En este último aspecto han sido numerosos los aportes de los consultores Mauricio Cabrera, experto en temas agrarios, y César Pardo, director de Finagro y del Banco Agrario en el primer gobierno de Álvaro Uribe.

Las propuestas para revitalizar el campo también pasan en el programa por procesos de reconciliación y lucha contra la violencia; fortalecimiento de la justicia y generación de alternativas medioambientales. El candidato ha desarrollado propuestas en estos temas con el apoyo de miembros de su campaña que tienen funciones que trascienden lo programático.

Con el senador Juan Fernando Cristo, que a su vez es director nacional de la campaña, ha trabajado lo relativo al tratamiento de las víctimas del conflicto armado; con el ex procurador Edgardo Maya, el diseño de una política de "democratización de la justicia"; y con Gloria Ospina, ex funcionaria del Ministerio de Defensa y de la Alcaldía de Bogotá, los temas medioambientales y algunos relativos a la seguridad.

No obstante, Pardo lidera este capítulo del programa en el que plantea planes nacionales integrales contra los delitos de secuestro, extorsión, hurto de residencias y hurto de vehículos -entre otros- y el diseño de propuestas de seguridad urbana. "Una política de seguridad para las ciudades debe garantizar el derecho a la seguridad de todos los ciudadanos a partir de planes locales liderados por el alcalde y la Policía Nacional, métodos de planeación y herramientas de vigilancia de última generación", dice, mientras el senador Cristo anota que "en materia de seguridad él tiene un historial propio que le permite definirse sin referencia a Uribe".

Si algo caracteriza al equipo de Pardo es su eclecticismo. Aquellos de sus integrantes que han trabajado en lo público provienen de distintos gobiernos y orillas políticas. Gloria Ospina fue funcionaria de la alcaldía de Luis Eduardo Garzón en Bogotá; Juan Fernando Cristo fue en sus orígenes cercano al ex presidente Samper, pero hoy tiene relación con todos los sectores del liberalismo; Carolina Fierro trabajó en la Consejería de seguridad del gobierno de Andrés Pastrana; César Pardo fue dirigente galanista y Mauricio Cabrera fue asesor de la ex candidata liberal y ex ministra de Agricultura Cecilia López. En la campaña también tienen un papel importante Horacio José Serpa -hijo de Horacio Serpa y quien es el secretario privado de Rafael Pardo- y Darío Vargas, quien fue consejero de Comunicaciones de César Gaviria y ahora, en compañía de las periodistas María Alejandra Villamizar y Marilyn López, está encargado de definir las estrategias de campaña y los temas de comunicaciones.

Ni el equipo ni Pardo le ven desventajas a esta diversidad. El candidato insiste en que "todos tienen un compromiso con la democracia y la defensa de las oportunidades. Es un equipo de gente nueva, donde se destacan las mujeres". Entre ellas Laura Pardo, su hija, quien coordina las giras políticas y apoya la vinculación de jóvenes a la campaña.