Home

Nación

Artículo

Policía capturó a 12 integrantes de la banda de microtráfico | Foto: SEMANA.

BOGOTÁ

Así cayó la banda de los ‘Verduleros’

La Policía capturó a 12 integrantes de una familia que expendió drogas en Bogotá durante 34 años. Entre ellos hay un extranjero.

25 de noviembre de 2014

Cerca de 18 meses tardó la investigación de la Policía para desmantelar una banda de microtráfico integrada por 12 personas, en su mayoría miembros de una misma familia. La noticia, que fue revelada este martes por la Policía de Bogotá, impactó porque esa familia delinquió a sus anchas durante 34 años.

Su centro de operaciones era la plaza de mercado del 7 de Agosto, en el corazón de Bogotá. Los investigadores también revelaron otro hecho que llamó poderosamente la atención: dentro de la organización trabajaba un hombre de origen alemán.

Se trata de Cristian Bauer, quien usó un local comercial heredado de sus padres para almacenar y distribuir en una bicicleta la droga por los puestos de mercado.

En las interceptaciones a su teléfono celular se encontraron mensajes en clave que ayudaron a establecer su responsabilidad. “Súbame una bolsa de empanadas”, le dice un jíbaro a Bauer. El hombre era el encargado de recibir la droga, armar las dosis y distribuirla. A él le encontraron más de 100 papeletas de diferentes tipos de estupefacientes en el momento de su captura.

Por ser extranjero, pocos sospechaban de Bauer. Los investigadores tuvieron que esperar varias semanas antes de encontrar el vínculo del alemán con la banda. Este hombre camuflaba su verdadero trabajo con la enseñanza de varios idiomas en su residencia.    

El detenido proviene de una familia acomodada que le dio la posibilidad de viajar por varias ciudades de Estados Unidos y Europa. Se sabe que en el local comercial de su propiedad tenía un taller de pintura de puertas y ventanas y además lo usaba como residencia.

Junto con él trabajaba toda una familia de vendedores de frutas y verduras al menudeo. El trabajo de investigación para desarticular la banda de los Cuestas se logró gracias a la infiltración de un agente, quien poco a poco fue ganando la confianza de los miembros de esta red.

El agente pudo establecer que la líder del combo de microtráfico era María Eulogia Cuestas, de más de 50 años, quien junto a dos hermanas, su hija y sobrinos, administraba y distribuía la droga en carretas de mercado. Era ella la que entregaba la droga al alemán para que este armara los paquetes con las dosis.