Las curiosidades de la posesión de ‘Juanmpa’

“Gracias a Dios y gracias a Colombia”, dijo Juan Manuel Santos en su discurso. Pero si algo debió agradecer todavía más fue al clima. Hace cuatro años el presidente se posesionó en medio de nubes grises y una lluvia que parecía anunciar tiempos difíciles. El jueves, el sol alumbró la Plaza Núñez; falta ver si es un buen o mal augurio para estos próximos cuatro años. 

El primer mandatario pronunció un discurso de 35 minutos en el que trazó el camino de los próximos cuatro años. Paz, equidad y educación serán los tres pilares sobre los que Santos trabajará en su segundo tiempo. Mientras tanto, a pocos asientos de distancia, doña Mechas, con un vestido azul rey, oía las palabras de ‘Juampa’ y sin pensarlo, se convirtió en la celebridad de la tarde. Hasta el presidente del senado, José David Name, la mencionó en su discurso. Todos querían una foto con ella. Desde Gina Parody, Alan Jara y Clara López, hasta el ratificado ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas. 

En la tarima se sentaron los presidentes invitados, entre ellos el ‘rey’ sin trono, Juan Carlos; Rafael Correa, con una camisa típica ecuatoriana; Ollanta Humala, de Perú; Enrique Peña Nieto, de México, y Juan Carlos Varela, de Panamá, entre otros. Eso sí, brilló por su ausencia el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aunque envió sus felicitaciones. La mayoría de mandatarios llevaban un pin con la paloma de la paz en sus vestidos y ya adentro, en la Casa de Nariño, Santos les enderezó a algunos el pendiente porque lo tenían al revés. 

No faltaron los que terminaron arrullados por el discurso y cabecearon, como el senador Hernán Andrade. Y esta vez Armando Benedetti se cuidó de no usar su tablet para obtener las últimas mejoras de Candy Crush. A la ceremonia también llegaron muy puntuales algunos miembros de la oposición, como Iván Cepeda, del Polo, que se sentó justo al lado de Claudia López, de Alianza Verde. 

Llamó bastante la atención el atuendo estilo escocés que llevaron los soldados que acompañaron al mandatario al final de la jornada. Hacia las 5 de la tarde, ya en los pasillos de la Casa de Nariño, los invitados felicitaron al presidente, y la primera dama, María Clemencia Rodríguez, aprovechó la ausencia de cámaras para tomarse un tinto. Eso sí, esta vez doña Mechas no estaba invitada.