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Las grabaciones de los para-políticos

SEMANA revela las llamadas que muestran cómo algunos congresistas presos compran testigos, sobornan funcionarios y tratan de engañar a la Corte y a la Fiscalía.

6 de octubre de 2007

El escándalo de la para-política regresa con vientos huracanados. Esta vez con las interceptaciones telefónicas hechas legalmente por el CTI a varios políticos, sus asistentes, familiares y abogados, que constan en un informe que la Fiscalía le envió a la Corte Suprema de Justicia el pasado martes. Más de 500 llamadas hechas a lo largo de este año, a una treintena de celulares, muestran una cara hasta ahora oculta de cómo se ha urdido la estrategia de defensa de varios para-políticos. Las conversaciones revelan que, más que inteligentes y argumentadas elaboraciones jurídicas, pruebas fehacientes y testigos auténticos y creíbles, algunos de los congresistas comprometidos están acudiendo a las peores artimañas para eludir el peso de la ley.

Algunas de las interceptaciones se les hicieron a políticos presos en La Picota y otras a congresistas antes de que fueran capturados. Todas en un período comprendido entre diciembre del año pasado y agosto de este año. Las grabaciones le ponen los pelos de punta a cualquiera. Uno de los congresistas que salen peor librados es Dieb Maloof, quien junto a su esposa y dos de sus asistentes aparece haciendo sobornos, compra de testigos y falsificando documentos.

El ex senador Álvaro Araújo Castro aparece en varias conversaciones con su hermano Sergio. Y éste, a su vez, en comprometedores episodios.

En las conversaciones están mencionados otros políticos como José Castro, Alfonso Campo Escobar, Luis Eduardo Vives, José Gamarra, Vicente Blel y hasta el senador Luis Humberto Gómez Gallo. En muchas de estas menciones queda en evidencia que los para-políticos intentan ponerse de acuerdo sobre qué versión darle a la justicia respecto de las reuniones realizadas con los paramilitares, y también hay valiosa información sobre el rearme paramilitar. Como si fuera poco, hay indicios, que de comprobarse, pondrían a 'Jorge 40' a las puertas de la extradición.

De todos los políticos quienes más se hunden con estas grabaciones son Maloof y su círculo más cercano. Una mujer, que es su mano derecha en el movimiento Colombia Viva, habla el 2 de enero de 2007 sobre un millonario soborno en el sector salud. En una conversación sostiene que "había que darle 3.000 millones de pesos al superintendente de Salud, José Renán Trujillo, y como no se le dieron, van a hacer una interventoría y auditoría a Salud Cóndor". Según el reporte de la Fiscalía, más adelante la mujer "confirma que los 3.000 millones de pesos se dan para que la EPS pueda trabajar sin ninguna visita de la superintendencia".

Esta misma mujer se encargó de falsear la contabilidad de la campaña de Jorge Castro, otro de los miembros de Colombia Viva, quien ha sido nombrado en varias ocasiones dentro de la para-política. Ella admite en una llamada que "la contabilidad de la campaña de Jorge Castro fue rechazada por el fondo nacional de campañas porque está muy mal. Hay soportes de 15 millones de pesos en una servilleta". Pero, más adelante, dice que ella "vuelve a hacer el libro contable con los soportes".

La manipulación de los testigos es otro de los delitos que revelan estas grabaciones. En una conversación entre Maloof y el ex representante a la Cámara José Gamarra se habla de una prueba que debe llegar a la Corte Suprema de Justicia y que "al parecer, fue modificada en la Fiscalía". Se trata de la declaración de Jaime Alberto Pérez Charris, el principal testigo de la sala penal contra Maloof.

En la desesperada búsqueda de testigos para que hablen en favor de Maloof, su esposa, Shadia, ex secretaria de seguridad de Barranquilla, habla de la necesidad de comprar a los escoltas y jefes de seguridad del senador, que hoy día son reinsertados. "Eso cuesta platica, pero si hay que comprarlos, se les compra. Hay que ofrecerles cinco a cada uno", dice.

Las irregularidades llegaron incluso a La Picota. La asistente de Maloof confiesa por teléfono que logró engañar a los guardias del Inpec y entrar a la cárcel, camuflado en una almohada, un celular para el senador.

Aunque Maloof sigue en prisión, su asistente sigue en función de la tajada de los contratos oficiales. En una conversación con Dilia Verdugo, funcionaria del Invima, dice sin pudor que "estamos buscando alcaldes amigos porque hay contratos en Invías. Gente seria que sale en promedio por 100 millones cada contrato. Pero lo importante es que respeten los porcentajes establecidos".

También en las grabaciones se habla de casos graves, que muestran el poder corruptor de la mafia en la propia Fiscalía. En una conversación de abril de este año, Maloof y su esposa hablan del empresario Hani Skafi Abuchaibe, gerente de Profibra, una empresa que fabrica lanchas y que es contratista de la Gobernación del Atlántico. Según la esposa de Maloof, ese señor "había pagado por quemar unos documentos sobre narcotráfico que tenía el CTI y que lo involucraban con Dieb". Efectivamente, en marzo pasado un inexplicable incendio consumió los archivos de esa dependencia en Barranquilla.

Igualmente, en una secuencia de varias grabaciones hay evidencias de que la esposa de Maloof contacta a personas de la Fiscalía para que sustraigan expedientes de esa dependencia y destruyan pruebas en una investigación que se le sigue a ella.

El 23 de febrero último, dos mujeres de la cuerda del senador Maloof hablan de que una de ellas fue donde un hombre de apellido Correa (al parecer funcionario del DAS) para entregarle un regalo. "Ya tú sabes qué significa el regalito", explica una de ellas. Según la Fiscalía, más adelante queda claro que las personas con las que se reunió la subalterna de Maloof "son paramilitares y se están rearmando".

En otra interceptación, del 26 de febrero, la esposa de Maloof recibe la llamada de un hombre llamado Frederik, quien le dice que la directora del CTI de Barranquilla (de nombre Sonia) volvió a pedir más cosas. "Esa hp vieja es la que tiene todo complicado. Los pelaos (al parecer agentes del CTI) ya se comprometieron conmigo a no seguir jodiendo, pero es esa vieja la que está jodiendo desde arriba". Shadia pregunta que si hay forma "de tocar a la vieja". Pero Frederik le responde que él es primo de "Héctor Carrillo, director seccional, y que va a intentar a través de él".

Como si fuera poco, una de las grabaciones de marzo revela que el ex congresista José Gamarra ha reunido a todos los firmantes del pacto con 'Jorge 40' en Sabanas de San Ángel, para ponerlos de acuerdo sobre qué versión darle a la Corte Suprema.

Historia de dos hermanos

Los Araújo no salen mejor librados. En el reporte de la Fiscalía hay decenas de comunicaciones entre el ex senador Álvaro Araújo Castro y su hermano Sergio. En algunas de ellas se habla, por ejemplo, de cómo eludir el embargo de los bienes después de la detención de Álvaro, y de la posible alteración de registros de salida del país en el DAS. Pero quizá lo más grave tiene que ver con la relación entre Sergio Araújo y Jorge Noguera, ex director del DAS, hoy en prisión.

El 4 de mayo de este año, a las 9:47 de la noche, al teléfono de Sergio Araújo entró una llamada de un hombre identificado como Manuel Riveira, quien le dice que "estuvo reunido con Jorge Noguera y que éste le entregó algunas cosas de Sergio, un poco regulares, con una persona de Valledupar". Al parecer, se refiere a una información de inteligencia que Noguera conoció de Sergio, cuando era director del DAS.

La otra conversación que deja muy mal parado a Sergio Araújo es la que se produce en marzo de este año, entre los hermanos Jorge Luis y Crispín Hernández Villazón. El primero es paramilitar y narcotraficante y es conocido como 'Boliche'. El segundo, abogado, muy cercano a varios de los políticos de la Costa. Ambos están actualmente bajo protección de la DEA. En la conversación citada, Jorge Luis le dice a Crispín que tuvo que llamar Sergio Araújo "para frentiarlo, porque lo estaban llamando hace varios días, que Sergio lo iba mandar matar a él. (...)". Dice que decidió llamarlo porque él "sí podía hacerle la vuelta con los de la oficina, que él no tenía problemas con Sergio, que su problema es con 'Jorge 40', pero que si va a defender a 'Jorge 40', ahí sí iban a tener problemas".

Más adelante, sin embargo, el propio 'Boliche' llama desde un número internacional a Sergio Araújo "y se pone a su entera disposición si en algo puede ayudar en el proceso de Álvaro y del viejo (Álvaro Araújo Noguera). Mande un abogado para coordinar las cosas".

Los diálogos entre los dos hermanos Hernández también arrojan información inesperada sobre cómo se están moviendo los paramilitares en los últimos meses y arrojarían evidencias de las trampas que los jefes paras le están haciendo a la justicia. En una conversación de marzo, 'Boliche' le cuenta a su hermano que "Jorge 40' le vendió la Costa Atlántica a los 'Mellizos' en 15 millones de dólares y ellos se fueron a vivir donde Hernán Giraldo". También habla de que "Álvaro Pupo (hermano de Ciro Pupo, actual alcalde de Valledupar) se puso el uniforme y se fue al monte y quedó bajo el mando de ellos. (...) Yo no me quiero meter en nada de eso de para-política; sí quisiera hacerle el favor a Dieb, pero si hablo me van a preguntar por Hernandito (Molina) y de él si sé mucho: es un bandido, matón y de todo".

Sin querer, 'Boliche' también desentraña uno de los mayores misterios de los paramilitares. En una conversación de junio pasado dice que "tiene contacto directo con Vicente (Castaño), que él le está manejando todo a 'Macaco'". Además le cuenta a Crispín un tenebroso episodio de presión sobre la justicia. Cuenta que "cuando fue la Fiscalía Delegada a tomarle declaración con el abogado de Hernando Molina, al abogado lo encañonaron, lo metieron a un hotel, lo encerraron, lo amarraron y le revisaron papel por papel. El abogado estaba llorando y enseguida fue cuando el abogado llamó a Hernando Molina".

El documento de la Fiscalía también tiene sorpresivos datos de la política nacional. Joaquín García, un periodista cercano al ex senador Luis Eduardo Vives, detenido por la para-política, comenta que "habló con el senador Luis Humberto Gómez Gallo, quien dijo que hay una orden de captura contra el ex gobernador de Tolima Guillermo Alfonso Jaramillo y que Gómez Gallo empujó eso con el Presidente". Para la época de esta llamada se había desatado un escándalo sobre supuestos vínculos de Jaramillo, quien pertenece al Polo Democrático, con las Farc, y muchos sectores del gobierno empezaron a hablar de que se iniciaría un proceso similar a la para-política, con la guerrilla. Al final, todo resultó ser más un montaje de propaganda que realidad.

El documento, de 79 páginas, con el sello oficial de la Fiscalía, queda en manos de la Corte Suprema. Los magistrados tendrán que valorar la gravedad de lo dicho en estas explosivas conversaciones. Lo cierto es que este nuevo capítulo de la para-política deja en evidencia que algunos políticos que, tratando de montar una estrategia de defensa que atropella los límites de la ética y el derecho, pueden terminar hundiéndose aun más.