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Ministra de Educación, María Fernanda Campo y presidente de Fecode, Senen Niño. | Foto: Archivo SEMANA

EDUCACIÓN

Lo que Mineducación y Fecode deben conciliar

La Federación Colombiana de Educadores exige ajustes frente a la carga laboral, la gratuidad educativa y la licitación para la nueva contratación en salud. La ministra Campo responde a sus reclamos.

22 de febrero de 2012

La movilización nacional de docentes que se realizó el pasado16 de febrero visibilizó las diferencias que alejan al Ministerio de Educación y a la Federación Colombiana de Educadores (Fecode).

Entre los temas en discusión están la jornada laboral de los docentes, la gratuidad educativa y la licitación para la nueva contratación del régimen de salud de los profesores.

Semana.com consultó con Senen Niño, presidente de Fecode, y María Fernanda Campo, ministra de Educación, sobre los reclamos de Fecode y las respuestas del Gobierno.

La gratuidad educativa

Fecode asegura que está de acuerdo con la gratuidad, pero señala que esta garantía debe estar sujeta a la inversión en la canasta escolar, que incluye nutrición, salud, transporte, útiles y uniformes.

“No es suficiente con garantizar la matrícula de los niños, también se debe frenar la deserción escolar. Muchos niños y jóvenes no pueden estudiar debido a la falta de recursos económicos”, dice Niño.

Al respecto, la ministra de Educación, María Fernanda Campo, destaca los logros de esta medida.

“No entiendo cómo la Federación está en contra de la gratuidad. Gracias a esta decisión se les permite a todos los niños y jóvenes en Colombia, desde el grado cero al grado 11, asistir de manera gratuita a cualquier institución educativa oficial. Está beneficiando a 8.500.000 niños a nivel nacional”. 

Rosa Julia Guzmán, directora de la Maestría en Pedagogía de la Universidad de la Sabana de Bogotá, aseguró en diálogo con Semana.com que la educación, por ser un derecho, “no debe ser un gasto sino una inversión”.

“Cuando el Gobierno piensa la educación como un gasto en su política pública, buscará reducir al máximo el peso presupuestal. La gratuidad educativa: pago de matrícula, carnetización y papelería, es un gasto menor que la gratuidad integral: pagar uniformes, cuadernos, alimentación, salud y transporte”, explica.

Guzmán agrega que es comprensible que el Gobierno defienda la gratuidad educativa, “lo cual evidencia la forma como piensan la educación”, y los docentes, en cambio, luchen por la gratuidad integral.

La docente precisa que la gratuidad escolar “debe ser total, de lo contrario sería simplemente una ayuda”. Finalmente, señala que el significado de la gratuidad ha variado de acuerdo con los usos sociales.

Jornada laboral
 
Niño explica que los colegios donde hay dos jornadas escolares están autorizados para organizar las horas de clase de 55 minutos en el bachillerato. En ese sentido, Fecode está de acuerdo en que los docentes repongan dentro de su jornada laboral los cinco minutos restantes, trabajando dos horas adicionales en la semana. No obstante, el gremio se opone a esta medida, porque restringe los tiempos de ocupación de las aulas.
 
"Con dos horas de clase más le van a quitar el espacio (el salón) a otro educador”. En su criterio, por dos horas que un docente repone, sobra otro profesor, es decir que este cambio "podría generar la cancelación de contratos a profesores que ya están en nómina", explica Niño.

“El Gobierno impuso que cada periodo de clase fuera de 60 minutos, antes era de 45 minutos. Nosotros hemos demostrado que la duración de atención de un niño es de 17 minutos”, asegura Niño, y sustenta en esta razón la propuesta del gremio sobre una duración aproximada de 20 minutos por clase. "Así se fortalecería la calidad educativa", dice este dirigente sindical. 

Ante el reclamo de los docentes, Campo explica que el Gobierno “no está ampliando la jornada laboral de los maestros”.

“Los maestros tienen un régimen especial. Tienen que trabajar 40 horas a la semana y de las 40, 30 horas tienen que estar en establecimientos educativos, de esas tienen que dictar clase 22 horas, y son clases de 60 minutos”, precisa la titular, quien explica que el docente que dicte clases de 55 minutos, debe reportarlas y dictar dos horas de clase adicionales para cumplir con sus compromisos, “pero dentro de su jornada laboral”.

En su criterio, “nada más impacta la calidad de educación de los niños y los jóvenes que el tiempo que están en clase”.

Régimen de salud

El gremio advierte sobre falencias en el régimen especial de salud que cubre a los docentes del país. Fecode exige un servicio médico oportuno para el magisterio y sus familias. “Nuestro régimen de salud en la práctica no es bueno”, dice.

"El régimen especial del que gozan los docentes está teniendo muchas falencias que no están siendo vigiladas y Fecode está denunciando la falta de una verdadera auditoría descentralizada que vigile en cada ente territorial el sistema de salud de los docentes", asegura Niño.
 
"No hay la posibilidad de exigirles a los prestadores de salud que cumplan con el contrato. Exigimos que el Ministerio de Educación revise cuánto se está pagando por maestro y le dé la sostenibilidad financiera al régimen de salud", añade el dirigente.

La ministra Campo asegura que la cartera de Educación está en proceso de adjudicar los servicios médicos asistenciales para los docentes y sus familias.

“Quiero reiterar que el Gobierno nacional garantizará la totalidad del régimen especial y excepcional que tiene el magisterio. Ese régimen es sagrado y lo vamos a preservar. Los beneficiarios son cerca de un millón de personas”, señala.

Campo precisa que la nueva licitación pública abrió la posibilidad para que se presentaran más oferentes de la prestación de servicios, una condición, que en su criterio, es “buena para los maestros porque habrá pluralidad de ofertas”.

La titular mencionó que como oferentes en la prestación de servicios están las Instituciones Prestadoras de Salud (IPS), medicina prepagada y las compañías legalmente capacitadas. En ese sentido, recordó que las Entidades Prestadoras de Salud (EPS) no podrán participar.

Se van a contratar auditorías médicas rigurosas para garantizar la calidad en la prestación de los servicios médicos y asistenciales para nuestros docentes y sus familias”, concluyó.