Los alcances del fenómeno climático de ‘La Niña’

El fenómeno climático de ‘La Niña’ golpea con fuerza varias zonas del país. Las fuertes lluvias que se vaticinaban para octubre dejan hasta ahora 88 muertos, 142.000 viviendas afectadas, 159 heridos y 900.000 damnificados.

Como lo anunció el IDEAM, la intensidad de lluvias para el segundo semestre de este año es la más alta, comparada con los años 2008 y 2009 e incluso la más fuerte de los últimos 15 años.
 
Los departamentos más críticos son Antioquia, Atlántico, Bolívar, Córdoba, Sucre, Cesar, Boyacá, Cundinamarca, Magdalena, Santander y Norte de Santander.

Y es que este mes ha llovido por más de 20 horas seguidas y el cambio climático se agudiza de tal forma, que las inundaciones, las avalanchas y los deslizamientos de tierra se multiplican cada hora, y hasta la economía nacional comienza a sufrir las consecuencias.

Entre los graves efectos están las averías en 23 vías de 12 departamentos. La emergencia vial ya está declarada en Antioquia, y el ministro de Transporte, Germán Cardona, anunció que el Gobierno destinará 30.000 millones de pesos adicionales para atender el bloqueo de numerosas carreteras.
 
Entre las vías afectadas están Dabeiba-Santa Fe de Antioquia, Medellín-Cisneros-Puerto Berrío, en Antioquia; Cúcuta-Pamplona y Ocaña-Cúcuta, en Norte de Santander; Los Curos-Málaga, la Transversal del Carare y Bucaramanga-San Alberto, en Santander, y El Banco-Tamalameque-El burro y Palermo-Salamina, en Magdalena.

En lo corrido de este año más de 45 millones de pesos se han ejecutado para la atención de contingencias viales y unos 8.500 efectivos de la Defensa Civil han atendido las emergencias desencadenadas por el invierno.

La emergencia desatada puso en alerta roja a los organismos de socorro, así lo señaló Carlos Iván Márquez, director de Socorro Nacional: “Ahora el riesgo se corre en la cuencas de los principales ríos que están a punto de desbordamiento”.

El riesgo se extiende a 433 municipios que se encuentran en estado de máxima alerta en materia de acueducto y alcantarillado. La preocupación se dilata conociéndose que la ola invernal finalizará en tres meses.

Las persecuciones climatológicas deterioran también los negocios. El comercio, el turismo y la movilidad se perjudican con el cierre parcial de vías que impactan la economía y cuyo uso es primariamente comercial: importación y exportación de productos.

¿Cómo disminuir los efectos negativos?
 
Para evitar los deslizamientos, las comunidades deben rechazar la deforestación y canalizar, como debe ser, los cultivos.
 
El IDEAM recomendó hacer la recolección de escombros y basuras sobre canales, cauces y humedales, para evitar taponamientos o inundaciones que pongan en peligro a las comunidades.

Finalmente, el llamado de atención también se hace a las autoridades municipales, para que adopten medidas preventivas que aseguren a los habitantes el acceso al servicio de agua potable.