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El fiscal general Eduardo Montealegre y el exministro de Justicia Alfonso Gómez Méndez. | Foto: Archivo SEMANA

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Los ‘varillazos’ del Fiscal a Gómez Méndez

Montealegre señala al exministro de difundir el rumor de su presunta enfermedad terminal.

27 de octubre de 2014

Empleando el símil con un personaje literario “con una gran memoria y que solo vive para recordar y odiar”, el fiscal general, Eduardo Montealegre, hizo otra dura referencia al exministro de Justicia Alfonso Gómez Méndez, a quien responsabilizó (junto con el también exministro Fernando Londoño) de divulgar el rumor de que él padece de una supuesta enfermedad incurable.

Sin embargo, más allá de estos recientes epítetos, esta aparente enemistad entre los dos eminentes juristas viene de tiempo atrás. A lo largo de los once meses que Gómez Méndez llevó las riendas del Ministerio de Justicia, los enfrentamientos con el fiscal Montealegre fueron el pan de cada día.

Quizá el más significativo tuvo que ver con la expedición de los decretos que formalizan la reestructuración de la Fiscalía, labor impulsada por Montealegre y que fue presentada con bombos y platillos en un evento al que asistió el presidente Juan Manuel Santos.

Gómez Méndez, como ministro de Justicia, debía firmar dicho decreto. La sorpresa llegó cuando no solo no asistió a la gala -justo pidió una licencia para ese día- sino que envió a su segundo, el viceministro Miguel Samper, a que estampara su rúbrica en la normativa.

Otra de las más duras pugnas tuvo lugar en el Congreso por cuenta del debate del código penitenciario, presentado por el Gobierno con el ánimo de reducir el crítico hacinamiento carcelario.

La Fiscalía atacó el proyecto y señaló que su aplicación, en vez de mejorar, empeoraría la situación de congestión en los establecimientos penitenciarios. El entonces titular de la cartera de Justicia no se quedó quieto y acusó a la Fiscalía de emplear indiscriminadamente la detención preventiva como medida de aseguramiento.

Otra disputa tuvo que ver con la reforma a la Justicia y al sistema penal planteada por Gómez Méndez, en la que planteaba un ‘tatequieto’ para la llamada ‘puerta giratoria’ entre las altas cortes. Montealegre la calificó de “retardataria e innecesaria”.

Tampoco faltaron las comparaciones del fiscal general con los antecesores del exministro: “Juan Carlos Esguerra, que fue un gran ministro, dejó diseñada una política muy audaz. Gómez Méndez recortó los alcances de esa política y, como siempre, retrocedió”.

En medio de todas estas ‘batallas’ Gómez Méndez ha sido cauto y ha guardado silencio. Sin embargo, para muchos la tímida reacción del exministro se debe a que se dio cuenta que su contradictor tiene mucho peso en la Casa de Nariño. Pero si esto es así, ¿por qué Montealegre todavía arremete contra Gómez Méndez? ¿Por qué cada vez que puede le suelta su “varillazo”?