Medellín, la ciudad del país con más balas perdidas

En ese año, 17 de los 57 casos de balas perdidas que ocurrieron en el país fueron en la capital antioqueña. El último hecho conocido fue el de la menor Alisson Britel Sánchez, quien murió por el impacto de un proyectil en su cabeza. 

Sin embargo, dicho número es menor a los 28 muertos que hubo en esa ciudad por la misma causa durante el 2011, como aseguró el alcalde (e) de Medellín, Luis Fernando Suárez.

Además, el alcalde divulgó la creación de un plan articulado que se comenzará a ejecutar en el primer trimestre del 2013 y que pretende generar un cambio en la cultura paisa frente a los festejos de año nuevo y el porte de armas. 

“La gente tiene que entender que no es posible celebrar con tiros al aire, con pólvora y con licor. Esa es una celebración nefasta. Es un tema de incultura ciudadana que se tiene que cambiar”, aseguró Suárez. 

Por su parte, Carlos Andrés Clavijo, vocero de la Federación Nacional de Pirotécnicos, explica que lo malo es satanizar todo tipo de pirotecnia. “Hay tres categorías, de las cuales sólo la última es para uso profesional. Pero el desconocimiento ha generado que toda la rama de pirotecnia se tache de mala y prohibida”.

Según Clavijo, lo que ley colombiana prohíbe es la venta de pólvora a niños, a personas ebrias y la comercialización de productos hechos con fósforo blanco, pero no la totalidad de la pirotecnia.

“Esa prohibición aumenta la venta clandestina porque se ha comprobado que donde están los puntos legalmente constituidos, bajan las cifras de quemados”.

Sin embargo, el 1 de noviembre del 2012, la Alcaldía de Medellín emitió el Decreto 1677, “por medio del cual se suspende el transporte, la venta, la comercialización, el almacenamiento, la fabricación, la distribución y el uso de toda clase de fuegos artificiales al aire libre, de luces de salón, globos y artículos pirotécnicos en general” hasta el 31 de enero del 2013.

En cuanto a los lesionados por balas perdidas, la ciudad instrumentó una prohibición de porte de armas que se extenderá hasta junio del 2013. A pesar de esto, durante las celebraciones de fin de año dos menores de edad fueron impactadas por balas perdidas en Medellín. Una de ellas, de 15 años, recibió el disparo en la cadera. La otra, Alisson Britel, murió en la noche del 1 de enero del 2013.

Los próximos festejos de año nuevo serán un reto para la ciudad con las peores cifras del país en esta materia, pues será entonces cuando se conozca si el plan articulado entre la Alcaldía de Medellín, el ICBF y la Policía Nacional triunfa o fracasa.

• 25% de quemados del país fueron en Antioquia

• 48% de quemados de Antioquia fueron en Medellín

• 52% de los quemados no estaban manipulando pólvora

• Más del 50% de quemados fueron menores de edad

• En el 2012, hubo un incremento del 18% de los quemados respecto al 2011