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'Megateo' | Foto: Archivo SEMANA

JUDICIAL

‘Megateo’, ¿detrás de atentados en Bogotá?

Las autoridades investigan si el jefe del último reducto del EPL, quien pidió dialogar desde el 2013, está tras los actos de terrorismo.

5 de abril de 2015

Entre el 24 y el 31 de marzo la Dijín hizo siete importantes capturas que estarían relacionadas con una serie de explosivos que fueron instalados en varios CAI de Bogotá y que encendieron las alarmas de las autoridades a inicios de año.

Ahora, unos panfletos que los delincuentes tenían en su poder están siendo materia de investigación en la Fiscalía General de la Nación, ya que mencionan a la desaparecida guerrilla Ejército Popular de Liberación (EPL), de la que queda un reducto en la región del Catatumbo nortesantandereano, dedicado de lleno al narcotráfico.

Según los investigadores, los detenidos hacen parte de una banda delincuencial que hacía acciones terroristas por encargo para el ELN. Los guerrilleros habrían contactado para este trabajo a dos desmovilizados de las FARC para que diseñaran los artefactos y los instalaran en varios CAI de la Policía en la capital. Por cada uno pagaban hasta 20 millones de pesos.

Durante las respectivas audiencias de legalización de captura de los primeros capturados, salieron a relucir unos panfletos que mencionaban el EPL. Las pesquisas apuntan a Víctor Ramón Navarro Serrano, ‘Megateo’, cabecilla de este grupo al margen de la ley, quien en entrevista con SEMANA en el 2013 hizo un llamado al Gobierno para llevar a cabo diálogos de paz.

Se trata de uno de los hombres más buscados del país y cuya proverbial capacidad de corromper a las autoridades le ha significado que ningún operativo en su contra haya resultado exitoso.

Semana.com confirmó el hallazgo de dichos panfletos con la Policía Nacional, aunque aseguraron que fueron usados para provocar “más terror”. Por su parte, fuentes de la Fiscalía aseguraron que “es una hipótesis en la que se está trabajando”.

El pasado 24 de marzo, una operación de la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación frustró un atentado terrorista que se pretendía ejecutar contra instalaciones de un CAI de la Policía Metropolitana de Bogotá.

En ese momento, las autoridades capturaron cinco personas que habrían sido las encargadas de instalar los artefactos en varios puntos de la capital. También, incautaron cuatro barras de explosivos, tres armas de fuego, dos temporizadores para activar explosivos, munición de guerra y material de uso privativo de las Fuerzas Militares.

Dentro de los detenidos estaba Wílmer Johan Cañón Cañón, ‘Pedro’. Según las investigaciones, él tenía línea directa con los autores materiales y contactaba personas para preparar e instalar los artefactos explosivos.

Siete días después, la Policía Nacional capturó en Pitalito (Huila) a otras dos personas, quienes serían los autores materiales.

Se trataba de ‘Conejo’ y ‘Pablo’, dos desmovilizados de los frentes octavo y 14 de las FARC, sindicados de participar en cinco acciones terroristas en los últimos dos meses, entre ellas la ocurrida en el barrio Quiroga (Bogotá) que dejó siete personas heridas.

Según la investigación, ambos exguerrilleros abandonaron la subversión hace ocho años, pero pusieron sus conocimientos en la manipulación de explosivos al servicio de una estructura de delincuentes comunes liderada por ‘Rojo’, que cobraba a narcotraficantes, integrantes de bandas criminales y grupos de extorsionistas por atentados que planeaban en cualquier parte del país.

Según las autoridades, las pruebas dan cuenta de que se pagaron 20 millones de pesos por cada explosión contra la fuerza pública. Parte de ese dinero habría llegado a los dos desmovilizados, quienes diseñaron los artefactos y los abandonaron en la noche en sitios oscuros donde fue difícil su detección.

Así las cosas, el material impreso está siendo analizado por investigadores de la Fiscalía. Buscan esclarecer si ‘Megateo’ tiene que ver con los hechos. Las autoridades esperan que con la captura de los dos ejecutores de los atentados se logre dar con los autores intelectuales de los explosivos que azotaron la capital.