Más de 80.000 afectados por suspensión en el Metro

El sur de Medellín y del Valle de Aburrá sufre una crisis en su transporte público desde la noche del pasado lunes 13 de enero. 

Cinco estaciones del Metro dejaron de operar puesto que el río se llevó 100 metros cúbicos de la banca que divide el afluente de las vías férreas. El problema se presentó entre las estaciones Ayurá y Envigado. 

"El deslizamiento también produjo el desprendimiento de material del talud de soporte, desconfinamiento y descompensación del talud y afectaciones en el régimen hidráulico del río, situación que podría generar una emergencia mayor al paso de los vagones del tren sobre el área afectada", se explica en un comunicado del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.

Debido a ello, se pararon las actividades del sistema masivo de transporte en las estaciones de Envigado, Itagüí, Sabaneta y La Estrella, como lo determinó el Área Metropolitana, el Metro y secretarías de tránsito de Medellín, Envigado, Itagüí, Sabaneta, La Estrella y Caldas.

Los afectados son más de 80.000 personas puesto que, según cifras del Metro, esa es la cantidad de usuarios que ingresan diariamente, entre las 4:30 a. m. y las 8:30 a. m, a las cinco estaciones mencionadas. 

Este número no incluye los pasajeros que entran a las estaciones después de esa hora ni a los usuarios que llegan a esas paradas del sur, como aclaró Jorge Mario Tobón, gerente Social y de Servicio al Cliente del Metro de Medellín. 

El directivo indicó que uno de los planes de contingencia es que los buses integrados que se conectaban con las estaciones que están cerradas, lleguen a una parada que sí esté en funcionamiento y sea cercana a las estaciones cerradas, como es el caso de Poblado.

“Entre las estaciones Poblado y Niquía (la última parada hacia el norte) están operando normalmente los trenes con una frecuencia de tres minutos. Mientras que entre Poblado y Ayurá pasa un Metro cada 12 minutos”, explicó Tobón.

La crisis se vive peor en Aguacatala y Poblado, precisamente porque están recibiendo la cantidad de usuarios de cinco estaciones. Los vagones y las plataformas están atestados, como se evidencia en las fotografías publicadas en las redes sociales. 

Las obras de mitigación del daño costarán alrededor de 800 millones de pesos, según datos del Área Metropolitana. Estos trabajos consisten en la construcción de un jarrillón que evite el desgaste del deslizamiento. Además, está prevista la instalación de dos sensores hacia el sur de donde se presentó el daño para monitorear el nivel del agua y otros cinco sensores en el lugar afectado para vigilar la estabilidad de la banca.