Montoya Úsuga pretendía esconderse en México, dice la Policía

Alexánder Montoya Úsuga, señalado integrante de la banda ‘Los urabeños’, fue detenido en Honduras el pasado martes, país en que arrendó un resort llamado Palma Real, en donde hizo los contactos pertinentes con los jefes del cartel mexicano ‘Los zetas’, para que lo acogieran y así escurrirse del cerco de las autoridades colombianas.

El 'flaco’, como se conoce en el mundo de la mafia a Montoya, sería una de las personas que iba a bordo del avión que el pasado 18 de marzo fue robado de uno de los hangares del aeropuerto El Dorado de Bogotá. La aeronave de matrícula HK 4406, tipo Beechcraft, modelo 1986, es de fabricación norteamericana y con capacidad para nueve pasajeros.

La investigación da cuenta de que en esa oportunidad el hombre habría abordado el aparato en Carepa, Antioquia, donde el avión aterrizó de manera irregular para luego partir a Honduras, donde hizo contactos con los narcos locales para expandir su imperio de envío de droga a Estados Unidos. 

Al aprovechar esos nexos, Montoya logró llegar hasta el cartel ‘Los zetas’.
 
La investigación que se le adelanta precisa que el 'Flaco' destinaba a Honduras los aviones que partían desde Bogotá y Medellín. En ese país se almacenaba la droga, y de allí era trasladada a México, para que la ya mencionada organización mafiosa, liderada por Heriberto Lazcano, distribuyera los cargamentos.

Precisamente, es de la mano de Lazcano que el 'Flaco' buscó el ingreso al país azteca, donde le darían una nueva identidad y, al parecer, se sometería a una serie de cirugías estéticas que prometían alterar su fisionomía.

¿Quién es el 'Flaco'?

En el prontuario delictivo que le figura a Montoya Úsuga pesa una condena a 40 años de prisión por homicidio en persona protegida y concierto para delinquir, así como nueve órdenes de captura vigentes en Cali y Villavicencio y dos Circulares Rojas de la
Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol).

Se dice que es uno de los narcotraficantes que logró la expansión de ‘Los urabeños’ a por lo menos cuatro departamentos del país. Además, señalan que coordinaba todas las actividades de narcotráfico y ajuste de cuentas en municipios como Tolú y Coveñas, en Sucre; Lorica y San Bernardo del Viento, en Córdoba; Villavicencio, en Meta, y algunas localidades del Valle del Cauca.