"NO CREO QUE NINGUN CANDIDATO ME QUITE VOTOS"

Hernando Duran Dussan, varias veces ministro, ex alcalde de Bogotá y ex parlamentario, se ha lanzado como candidato para el Concejo de Bogotá y adelanta una agitada campana en la que se ha mostrado especialmente beligerante. SEMANA lo entrevistó con el objeto de conocer sus puntos de vista sobre sus posibilidades electorales y otros temas de actualidad.
SEMANA: ¿Cómo cree usted que quedarían repartidos los concejales liberales después de las próximas elecciones de mitaca?
HERNANDO DURAN DUSSAN:
Cinco para Durán, cinco para Galán, uno para Ernesto Samper, uno para Guerrero y uno para algún espontáneo.
S.: ¿Cuál caudal de votación le daría piso para seguir adelante hasta las elecciones presidenciales? ¿Cuál lo haría retirarse definitivamente de la política?
H.D.D.: De mi candidatura presidencial sólo han hablado mis amigos... y especialmente mis enemigos. Pero resulta que yo, a diferencia de Galán que insiste en ser candidato presidencial, sólo insisto en ser candidato al Concejo. Para mí, salir mal sería obtener, como la lista bandera la vez pasada, sólo dos concejales o como los concejales residuales que salieron con un renglón solamente. Pero las encuestas me dan cerca de 75 mil votos. Yo espero obtener 100 mil en la recta final. Mis votos están al servicio de la unión liberal. De todas maneras, yo continuaré haciendo política, independientemente de los votos que obtenga. ¿Quién dijo que me iba a retirar? Además a mí me ha tocado asumir la dirección del partido en Bogotá. La Dirección Liberal decidió toda aspirar al Concejo y yo creo que eso es incompatible. O uno está en la Dirección Liberal o uno es candidato.
S.: ¿Galán no afecta sus posibilidades?
H.D.D.: Galán no me ha hecho daño, porque no me puede atacar por nada.
S.: ¿ Y Ernesto Samper?
H.D.D.: El doctor Samper quizás pueda recoger parte del electorado que no vote por mí. Pienso que puede ser la razón que tuvo para lanzarse. No creo que ningún candidato me quite votos.
S.: ¿Qué opina usted de las opiniones de algunos observadores en el sentido de que su campaña, que empezó muy bien, estaría terminando mal?
H.D.D.: Este concepto se contrarresta con la opinión contraria que tienen algunas personas que aseguran que mi campaña ahora está mejor que antes. Y si eso se pudiera medir por la cantidad de gente que sale a las manifestaciones, es mucha la que yo he visto en las mías.
S.: ¿ Qué opina de los recientes cambios en el ministerio de Defensa y en las Fuerzas Armadas?
H.D.D.: Creo que no se justificaba cambiar a Landazábal por lo que dijo, ni poner de ministro a Matamoros que, en mi opinión, dijo algo que lo comprometía más que a Landazábal. Ambos me parecen excelentes oficiales. Deploro la salida de Landazábal, aunque sé que Matamoros es un excelente oficial que se desempeñará muy bien. Me parece que fue otro de esos golpes de opinión populistas que Belisario busca periódicamente, pero que en el fondo no cambia la situación: ni mejora las relaciones entre los militares y el gobierno, ni mejora las relaciones entre la guerrilla y las Fuerzas Militares, ni mejora las relaciones entre las guerrilla, la ciudadanía y el gobierno.
S.: ¿Qué opina de la fórmula del ministro de Defensa civil?
H.D.D.: Cuando el país deje de estar en guerra puede ser una solución acertada como lo ha sido en el pasado. Pero a este estado de violencia que se vive hay que hacerle frente con un ministro de Defensa militar.
S.: ¿Cree usted que Betancur está dejando sin banderas al partido liberal?
H.D.D.: No, no creo. Pero, además, me parece que B.B. no está haciendo una política conservadora. O si no, pregúntele a los conservadores que, en público, hablan bien de él, pero en privado dicen que es pésimo. Tampoco está haciendo una política liberal. Es populista. Se aproxima más al peronismo justicialista que a cualquiera otra concepción política.
S.: ¿Entonces piensa usted que el Movimiento Nacional puede llegar a consolidarse como partido político?
H.D.D.: Los movimientos nacionales no han durado en este país más de un gobierno y, a veces, ni uno. El partido conservador se alista con Alvaro Gómez Hurtado, pero nadie va a creerle si lo presentan como candidato nacional. La única que puede aspirar a encarnar el Movimiento Nacional es María Eugenia, pero en ese caso se dividiría el partido conservador.