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Séverine Mallégoll es experta atención a drogadictos. | Foto: David Amado

DROGAS

"No se puede empezar con una 'narcosala'", dice francesa experta en atención a drogadictos

Séverine Mallégoll es una enfermera francesa con especialidad en adictología que está en Bogotá para hablar sobre políticas de prevención de drogadicción. Su visita coincide con el inicio en la capital de la primera fase de la atención a los drogadictos en la zona del Bronx.

24 de septiembre de 2012

Esta francesa de 35 años, experta en prevención de riesgo en drogadictos, trabaja en París en la fundación Gaia, la cual tiene dos vehículos con los cuales no sólo se hacen campañas de prevención, también se entregan los kits para que puedan consumir las drogas. Ella habló con Semana.com sobre este tema que está en primera plana en Bogotá.

Semana.com: ¿Por qué está en Bogotá?

Séverine Mallégoll: Estoy acá para apoyar la Fundación Ponte en Mí Lugar en un diplomado sobre reducción del consumo de droga y dicto charlas en universidades. Estoy capacitando a los jóvenes.
 
Semana.com: ¿Cuál es su trabajo en Francia con los consumidores?

SM: Estoy trabajando en la fundación para la atención a drogadictos. Tenemos una oficina y dos busetas, una para el tratamiento de la sustitución de la heroína con metadona. Con los dos vehículos vamos a los lugares donde hay zonas problemáticas. La otra buseta ayuda a la reducción del riesgo del uso del consumo de drogas y prestamos el servicio médico, los curamos y determinamos si tienen enfermedades contagiosas como el SIDA y la hepatitis C.

La idea de la fundación es encontrar el usuario de droga y establecer sus condiciones médicas, sociales y sicológicas aplicando la política de la reducción del riesgo y del daño de las drogas.

Semana.com: En Bogotá se inició un plan de atención médica a drogadictos, desde su experiencia ¿qué se debe hacer para mejorar la salud de ellos?

SM: Hay que empezar a reducir los riesgos. No sé si en Colombia está bien definido este tema en el consumo de drogas. Nosotros empezamos a combatir el contagio de enfermedades como el sida en el año de 1980. Hay que tener una política de salud pública para evitar que los drogadictos reutilicen los utensilios para consumir drogas.

Semana.com: ¿Cómo funcionan las busetas de atención en su país?

SM:
Hay una buseta para el tratamiento de la sustitución del consumo de la heroína. El interés es que las personas poco a poco bajen el consumo. Este es un tratamiento de rehabilitación que busca la socialización y que salgan de las calles.

Es una buseta que va en los lugares de venta y consumo de droga en los horarios de ellos, en la tarde y la noche. Les explicamos cómo deben usar las jeringas, agujas, cucharas, pipa para fumar el crack y los kit para oler cocaína. Entregamos además boletines con información sobre riesgos en la salud.

Tenemos un espacio de consulta, donde se hace curación de los heridos con
infecciones… se detecta la hepatisis C y VIH. Hay terapia con agujas para quitar la ganas de consumir a los adictos de cocaína y crack. Mucha Orientación.

Semana.com: ¿Y la tercera?

SM: Esta tercera buseta hace parte de Médicos del Mundo, allí se hace un experimento con una sala de inyección. Les drogadictos vienen con la sustancia, se inyectan al frente de dos profesionales que le aconsejan y le cuidan durante y después de la inyección. Es un trabajo de etapas.

Semana.com: ¿Qué recomendación se puede hacer para aplicar en Bogotá?

SM:
Escuché que quieren crear una sala de consumo. Nosotros empezamos en Francia en 1985 en los proyectos de reducción de riesgo y solamente vamos a empezar con una sala de consumo en enero del 2013. Hay que ir con mucha prudencia. No se puede empezar con una ‘narcosala’. Además, en la buseta de experimentación las personas vienen con sus drogas, no regalamos las sustancia.

Semana.com: ¿Precisamente, por qué no entregan la droga?

SM: Nosotros no la regalamos ni se inyecta a nadie. Nosotros entregamos consejos para que ingresen al sistema. (...) La idea no es ayudarles a drogarse, lo que buscamos es disminuir el riesgo para el contagio de infecciones y enfermedades relacionadas con la inyección.

Semana.com: ¿Cuáles son las diferencias entre un usuario de droga en París (Francia) y uno en Bogotá?

SM: Eso depende de la cultura, de la situación del usuario y de su consumo (...) En Francia se usa bastante la heroína y sus derivados. En cuanto a las diferencia físicas, yo no miro la cara de la gente, eso no importa. Su rehabilitación es lo que hay que ver. A veces eso proceso de rehabilitación empieza con un lugar para bañarse y descansar.