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El 19 de agosto del 2013 comenzó un paro agrario que terminó casi un mes después. | Foto: Diana Sánchez

PROTESTAS

Los paros que deberá enfrentar Santos

Los sectores que representan gran parte del campo pararán sus actividades a pocos días de las elecciones.

16 de abril de 2014

El gobierno no la tiene nada fácil. A escasos días de las elecciones presidenciales, las dignidades agropecuarias comenzarán un paro el 28 de abril y lo mismo hará la cumbre de campesinos, indígenas y afros el 5 de mayo.

Los dos sectores representan casi a todas los pequeñas y medianos productores, y ambos quieren que se cumplan las promesas que el gobierno hizo desde hace meses.

Aunque las movilizaciones comenzarán en la recta final para elegir un nuevo presidente, las inconformidades son de meses atrás y Santos las conocía con anterioridad.

En el caso de la Dignidad Agropecuaria, desde enero los productores de café, cacao, cebolla, maíz, papa y arroz le escribieron al presidente diciéndole que la mayoría de los puntos acordados para terminar el paro del año pasado no se habían cumplido.

Dos meses después, la Cumbre Agraria Campesina, Étnica y Popular, donde se reunieron 4.000 representantes, publicó un documento con ocho exigencias para el gobierno en temas como zonas de reserva campesina, cultivos de coca y derechos políticos.

Lo que tienen en común los dos sectores son los problemas que les han causado los tratados de libre comercio y su inconformidad con el gobierno. Por lo demás, las dignidades se ocupan de temas como los costos de las producciones agrarias, los problemas de los campesinos y empresarios agrícolas y el dinero que les debe el gobierno.

La cumbre agraria, en cambio, habla de cómo usar las tierras según quiénes vivan en ellas  (sean campesinos, afros o indígenas), piden mejorar la salud y la infraestructura en lo rural, promueven las zonas de reserva campesina y opinan sobre los diálogos de paz.

Aunque los dos sectores tienen sus diferencias, ambos entrarán a paro por promesas incumplidas.

Según Óscar Gutiérrez, dirigente de Dignidad Cafetera y representante de Dignidad Agropecuaria, el gobierno les debe del 2013 130.000 millones de pesos a los productores de café. 

“No hay una política seria para que Colombia sea potencia agrícola, a pesar de que tiene la capacidad para serlo. La mayoría de lo que producimos se va al extranjero e importamos de una manera que el agro pequeño y mediano del país se terminará destruyendo”, sostiene Gutiérrez. 

Uno de los ejemplos que para él demuestra esto es que la producción de trigo alcanza sólo el 1 % del consumo nacional. “Están a punto de eliminarlo y cambiarlo por comida extranjera”, explica el dirigente agrario. 

Los tratados de libre comercio también son uno de los temas  de la cumbre agraria. El pasado 11 de abril, el gobierno intentó convencer a ese sector de que no entrara a paro. La solución propuesta fue un plazo de 10 días en los que el gobierno actúe respecto a los ocho puntos presentados por la cumbre agraria

“Es un plazo para que estudie algo que debió estudiar desde hace mucho tiempo porque nuestras exigencias estaban desde marzo”, explicó Alberto Yace, autoridad en el tema agrario por parte de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), que hace parte de la cumbre.

Otros de los integrantes de esa organización son los campesinos del Catatumbo, que el año pasado protestaron durante meses hasta que el gobierno les hizo más de 10 promesas, entre ellas las de la zona de reserva campesina. 

“Nosotros tenemos 13 puntos y sólo se han logrado tres acuerdos. Si en este tiempo no hay más pactos, Catatumbo irá otra vez a la movilización”, indicó César Jerez vocero de los campesinos de esa región de Norte de Santander.

El descontento en los pequeños y medianos campesinos es generalizado. Unos piden mejores precios en los insumos, otros hablan de una reforma para el campo y ambos están a la expectativa de qué hará Santos para desmontar el paro agrario.