Perdieron su libertad por robar botella de licor

Una curiosa y hasta insólita condena de dos años y cinco meses de detención domiciliaria es la que tendrán que pagar dos jóvenes que fueron sorprendidos hurtando una botella de vodka en un supermercado en Bogotá. 

Para la juez 28 penal municipal, todos los delitos sin importar su gravedad son reprochables, y el hecho cometido por Óscar Javier Díaz Sánchez, de 23 años, y Fredy Orlando Puentes, de 18 años,  no es la excepción. Ellos, dijo la juez, deben responder por sus actuaciones, teniendo en cuenta que su conducta es un mal ejemplo para la sociedad.

Pese a que el costo de la botella de licor no supera los 80 mil pesos, la juez manifestó durante la lectura del fallo que los jóvenes obraron libremente y dieron rienda suelta su voluntad, sabiendo que estaban cometiendo un delito.

En la sentencia, la juez ordenó también que comparezcan ante su despacho cuando sean requeridos y paguen una multa de un salario mínimo legal vigente.

Los hechos por los que se profirió la pena a purgar, fueron cometidos en la noche del 4 de septiembre del 2012, cuando Díaz y Puentes guardaron en un morral una botella de vodka sin haberla pagado en la caja del supermercado.

Según la Fiscalía, tras ser sorprendidos por el guardia de seguridad del establecimiento comercial, los hoy condenados lo agredieron, lo que les significó pagar además una indemnización a la víctima.

Díaz y Puentes fueron imputados con los delitos de hurto calificado y agravado por la violencia ejercida contra los guardias del establecimiento público.

Esta condena se suma a otros sonados procesos judiciales, como es el caso ocurrido en Cali, donde un hombre fue detenido y enviado a la cárcel por robar un caldo de gallina, mientras en el Atlántico otro joven fue capturado por hurtar una gallina viva.