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| Foto: FLIP

FRONTERA

Ecuador le da plazo de 12 horas a Guacho para que aclare situación de los secuestrados

El presidente Lenín Moreno aseguró que las fotos divulgadas, que retratarían el asesinato del equipo de El Comercio, apuntan a ser verídicas. Sin embargo, no confirmó el crimen. Anunció operaciones contundentes contra la disidencia de las Farc.

12 de abril de 2018

Luego de un viaje relámpago desde Lima, donde se alistaba para participar en la Cumbre de las Américas, el presidente ecuatoriano Lenín Moreno se refirió a la posible tragedia que tiene en vilo a su país y a Colombia: el asesinato de tres miembros de un equipo periodístico del diario El Comercio, a manos del frente Oliver Sinisterra, una disidencia de las Farc.

El primer mandatario de los ecuatorianos, luego de conocer las imágenes que retratarían los crímenes, aseguró que la posibilidad de que correspondan a los secuestrados es alta. Sin embargo, aclaró que "las acciones periciales no dan la contundencia que entenderán que no puede dar una fotografía". Por eso, no confirmó la muerte de los periodistas.

Moreno le dio un plazo de 12 horas al grupo comandado por alias Guacho para que den claridad sobre la situación de los ecuatorianos. "Ya basta de contemplaciones, no podemos dejar que esos nos impongan sus leyes. Acciones contundentes en el campo que ellos han escogido y los vamos a derrotar (...) Iremos con toda la contundencia, sin contemplaciones, para sancionar a estos violadores de todos los derechos humanos.", agregó.

Luego del plazo de 12 horas, aseguró Moreno, se emprenderán acciones conjuntas con Colombia contra el grupo ilegal. Esas operaciones ya habrían sido conversadas, de su parte, con el presidente Juan Manuel Santos.

Momentos antes, el coronel Fausto Olivo, coordinador de criminalística y ciencias forenses de Ecuador, se había manifestado en un sentido similar. "Podemos decir que por métodos precientíficos, a través del análisis de las prendas, estas son coincidentes con dos de las personas secuestradas, y por medio del estudio biométrico del rostro nos da una alta probabilidad que sea coincidente con otro de ellos (...) Existen probabilidades de la ocurrencia del hecho, pero podríamos solo confirmarlo con la escena, por lo que seguiremos investigando".

El equipo que fue plagiado el pasado 26 de marzo estaba conformado por del periodista Javier Ortega, de 32 años, el fotógrafo Paúl Rivas, de 45 años, y el conductor Efraín Segarra, de 60 años de edad, todos de nacionalidad ecuatoriana.  Este miércoles, un comunicado del frente Oliver Sinisterra, una disidencia de las Farc que opera en el suroccidente del país, dio la noticia del cruel crimen. Un día después, el Canal RCN recibió fotos de los tres trabajadores del diario El Comercio.

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Los ecuatorianos fueron secuestradosen la parroquia de Mataje, provincia de Esmeraldas, "mientras hacía su trabajo, mientras realizaba una cobertura periodística sobre las condiciones de vida de los pobladores que habitan en esta zona, en la que en los últimos meses se han registrado varios atentados con explosivos", según aseguraron sus familiares.

El frente Oliver Sinisterra emitió en su momento pruebas de supervivencia de los secuestrados, y exigía que, a cambio de su liberación, las autoridades ecuatorianas dejaran ir a varios criminales de ese grupo que habían sido capturados en ese país.

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Esa disidencia de las Farc está comandada por alias Guacho, quien empezó a conocerse ampliamente en Nariño a finales del año pasado, cuando lo señalaron de algunos ataques ocurridos en la zona. Hoy ya está consolidado en el radar de las autoridades. En los últimos meses, con el desarme de las Farc, Guacho asumió el control de gran parte de los cultivos ilícitos entre las zonas del Alto y el Bajo Mira, donde hay mayor cantidad de coca en el país.

Con la relevancia que ha adquirido en el escenario criminal, las acciones de las autoridades de ambos países contra el disidente también se han intensificado. Ante esa arremetida, según algunas versiones, Guacho habría secuestrado a los periodistas, para usarlos como una especia de escudo.