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La directora administrativa del Concejo le envió un memorando al concejal García en donde prohibía el ingreso del canino. | Foto: Archivo

BOGOTÁ

La perra que logró enfrentar al Concejo

El animal, adoptado por la bancada animalista, estuvo al borde del destierro por morder a una funcionaria.

25 de noviembre de 2013

Un debate poco convencional tiene agarrado a más de uno en el Concejo de Bogotá. Una perra callejera que llegó hace dos años al Concejo y que fue adoptada por la bancada animalista, conformada por 19 cabildantes, podría ser desterrada.


Hace un mes, durante un simulacro de evacuación, una señora trató de retirar un trapero que estaba justo debajo de la perra, llamada 'Canela'. El animal se asustó y la mordió. Aunque la mordida no fue grave, fue motivo suficiente para que desde la dirección administrativa le prohibieran el ingreso al recinto de la Corporación por “ser un riesgo para los trabajadores”.

A pesar del episodio, el concejal Diego García -miembro de la bancada y quien adoptó a 'Canela'- aseguró que tener al animal dentro del concejo no es amenaza para los trabajadores. “'Canela', mascota oficial del Concejo, no representa un peligro porque no es agresiva, eso lo hizo porque se asusto, ella es muy tímida y sólo cuida la institución”.

Paula Castro, directora administrativa y presidenta de Copaso (Comité Paritario de Salud Ocupacional) le envió un memorando a García, en donde decía claramente que a partir de la fecha del memorando (20 de noviembre), el canino tendría prohibida la entrada al cabildo. “Prohibirle (a 'Canela') su entrada a las instalaciones del Concejo y ubicarla en un lugar donde su hábitat sea el adecuado y no genere estrés al canino. Debido a unas inquietudes presentadas por funcionarios del Concejo es un riesgo inminente para los funcionarios y visitantes”, concluyó en la misiva.

La bancada animalista recibió la decisión como todo un insulto y un irrespeto con el grupo, pues no se les consultó la medida y ni siquiera se pensó en otras alternativas. “La medida fue atrevida, pues nunca me hicieron una solicitud verbal, ya que fui yo el que adoptó a la mascota”, concluyó García.

Fue entonces cuando el cabildante decidió radicar una emotiva carta en respuesta al memorando de la administradora. La carta contó con 500 firmas de funcionarios de diferentes áreas, en la cual negaban la decisión de que 'Canela' fuera expulsada del Concejo. 

Después de varias reuniones y de que la bancada animalista protestara por la decisión, la presidenta echó para atrás la medida. 

Maria Clara Name, presidenta del Concejo y quien también hace parte de la bancada asegura que la perra no se ira del cabildo. “Se han quejado de que la mascota ha atacado a varios funcionarios y la última funcionaria mordida, fue incapacitada por dos días. Pero la decisión ha sido reubicarla dentro del concejo, en un lugar donde no sea riesgoso para los funcionarios”.

Pero entonces, ¿por qué la directora administrativa le manda un memorando a García, en donde prohíbe el ingreso al canino? Según Maria Clara, como la directora es la presidenta de Copaso, la carta fue simplemente una sugerencia para tomar acciones correctivas y de prevención del riesgo, que es el trabajo del Comité.

Por el momento, 'Canela' será reubicada dentro del recinto y estará bajo la supervisión de un etólogo experto en comportamiento animal, quien la entrenará con el ánimo de que no se vuelva a presentar dicha situación.

Al inicio, las quejas de los funcionarios parecieron ganarle al canino, pues según varios de ellos habían sido atacados por la perra. Pero finalmente, la bancada ganó la batalla y 'Canela' seguirá cuidando al Concejo como lo ha venido haciendo desde hace dos años.

Superado el tema de la perra, los cabildantes ahora se aprestan a resolver temas vitales para Bogotá. Pero sobre todo, a resolver sus problemas con la justicia, porque más de uno deberá responder por el 'carrusel' de la contratación.