Petro llenó la Plaza de la Paz y arremetió contra todo el mundo

Gustavo Petro estuvo en Barranquilla. Desde esa ciudad en el Caribe colombiano el exmandatario no sólo lanzó su propuesta de la Constituyente, también arremetió contra todos. Lo hizo contra el presidente Juan Manuel Santos, el procurador Alejandro Ordóñez, el Congreso, al que calificó de ilegítimo y el cual, según él, fue elegido a punta de compra de votos. En su discursó también denostó de Álvaro Uribe, del débil sistema democrático y contra los que dirigen a Colombia, a quienes calificó de “incapaces”.

Por supuesto, Petro reivindicó su tarea como alcalde de Bogotá y contrapuso su ejemplo como mandatario contra lo que calificó como la incapacidad de las clases tradicionales para gobernar este país. Agradeció a las 4.000 personas que lo esperaban en la Plaza de la Paz por la compañía y la solidaridad. Dijo que no venía a pedir que votaran por nadie, porque ni él mismo puede ser elegido en los próximos años.

Su discurso giró en la reivindicación de su obra como alcalde. En la nutrida plaza afirmó que durante sus dos años de gobierno en la capital demostró que puede haber un cambio de modelo social, pues en un solo año –dijo-, 190.000 personas salieron de la pobreza.

Defendió el hecho de haber tratado con igualdad a los recicladores frente a los poderosos zares del aseo y que se pudo construir paz en Bogotá, gracias a un gobierno progresista. “Demostramos que se puede construir democracia”.

con la camiseta puesta por la Constutuyente insistió en que a pesar de que muchos en la ciudad no quieran ver esos resultados, durante 14 meses logró que no muriera un solo niño de hambre al reducir la tasa de mortalidad e igualarla a la de países desarrollados.

Dijo que venía de una ciudad en la cual se demostró que para reducir la violencia no fue necesario utilizar tanques y fusiles. “Lo que se necesita son libros”.

Sus logros lo volvieron peligroso, dijo Petro. Según el exmandatario, les dio prioridad a la diferencia de modelos de atención en salud y educación al incrementar en  2,4 a 3,4 billones de pesos estos dos temas sociales. Eso permitió aumentar la atención a los niños entre cero y cinco años.

Finalmente fue tajante en afirmar que cambió el modelo de salud mercantilista de la Ley 100 al romper los paradigmas de la mercancía y la usura y mostrar que este servicio podía ser público.

En síntesis, en sus dos años de gobierno pudo mostrar un modelo diferente para Colombia, el modelo de la democracia y la paz. Pero quisieron acabar ese modelo y hoy la población bogotana ve el futuro con pesimismo y, por el contrario, la ciudad optimista era la ciudad humana gobernada por él.

Contra Ordóñez

En su arremetida contra el procurador Alejandro Ordóñez lo llamó nuevamente Savonarola, el mismo que quemó libros, ‘ese nos ha condenado a la hoguera porque soy un paladín de la libertad y de la democracia, pero el dictamen de la santa inquisición levantó la indignación’, agregó.

La intervención de Petro fue en la recién remodelada Plaza de la Paz, frente a la catedral de Barranquilla ante unas 4.000 personas, muchos jóvenes, pero también mucha gente de la izquierda tradicional barranquillera gente madura y curtida en duras batallas políticas.

El exalcalde de Bogotá calificó repetidamente al procurador Ordoñez como un fanático a quien en otro país lo habrían aislado porque ha transformado a la Procuraduría en una policía político-religiosa que está acabando con la diferencia en Colombia.

Petro recorrerá el país para promover una constituyente en la cual va a reclamar la autonomía regional y a unificar la diversidad.