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Alejandro Ordóñez y María Eugenia Carreño | Foto: Archivo SEMANA

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Pierde el procurador con la elección de nuevo magistrado

El Consejo de Estado dejó por fuera a María Eugenia Carreño, su mano derecha en el organismo de control y quien aspiraba a ser nombrada en ese alto tribunal.

15 de julio de 2015

La carrera por elegir nuevos magistrados que se vive en el Consejo de Estado comienza a tener resultados. La alta corporación había prometido que hoy se concentraría en encontrar los reemplazos para las nueve plazas que tienen vacantes. El primer afortunado fue Carmelo Perdomo, quien fue elegido en la sección segunda como reemplazo de Bertha Lucía Ramírez.

Su elección representó una doble noticia. Por un lado, fue bien recibido que un afrodescendiente llegara a ocupar ese alto cargo. Perdomo tiene una amplia trayectoria en la rama judicial. Viene de ser presidente del Tribunal de Cundinamarca y antes había sido magistrado de los Tribunales de Casanare y de Boyacá. En la audiencia pública que se hace para elegir candidatos contó que había crecido con muchas limitaciones económicas en “una casa de paredes de bareque” en Cereté (Córdoba). Muchos lo reconocen como buen allegado del presidente de esa corporación, Luis Rafael Vergara.

Pero lo que más llamó la atención no fue su elección, sino que no hubiera quedado en el cargo otra aspirante que muchos daban por segura: María Eugenia Carreño. La abogada es reconocida como la dama de hierro de la Procuraduría y como la mano derecha de Alejandro Ordóñez. Como procuradora para asuntos disciplinarios ha llevado los procesos de más calado del país como la destitución del exalcalde Samuel Moreno y otros funcionarios. Durante ocho años, Carreño trabajó en el Consejo de Estado con la magistrada a la que le estaban buscando reemplazo (Bertha Lucía Ramirez), con Gerardo Arenas y con Ordóñez.

Carreño es la persona más cercana al procurador que se estaba postulando al Consejo de Estado. Como se sabe, en ese alto tribunal se juega una demanda contra la elección de Ordóñez, quien fue magistrado y presidente de esa corporación. La demanda fue interpuesta por la Corporación Dejusticia y argumenta que la elección del procurador es nula pues se basó en la práctica del “yo te elijo, tú me eliges”.

El proceso ha estado enredado más de un año en el Consejo de Estado por múltiples recursos procesales. En junio del 2014 la ponencia del magistrado Alberto Yepes pedía declarar nula la elección. Sin embargo, este fue recusado y la decisión se congeló. Como la mayoría de los magistrados que eran partidarios de dejar a Ordóñez en su cargo, como Susana Buitrago, Marco Antonio Velilla, Alfonso Vargas, entre otros, se han ido en los últimos meses, quien entre a reemplazarlos era clave para esa decisión.

Por eso, la no elección de Carreño, una abogada muy reconocida en el medio que seguramente tenía todos los méritos para ocupar el cargo, es muy significativa para el procurador. Todavía faltan ocho cupos.