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67 municipios, en 23 departamentos, contarán con especial atención de las autoridades. | Foto: Archivo Semana.

ELECCIONES 2011

Plan Democracia, concentrado en los municipios de mayor riesgo en el país

67 municipios, en 23 departamentos, contarán con especial atención de las autoridades el próximo 30 de octubre. El propósito: garantizar el derecho al voto a todos los ciudadanos.

25 de octubre de 2011

Que en todos los rincones del país se pueda votar. Libremente, sin presiones, en paz. Ese es el propósito del Plan Democracia, que desde hace por lo menos cinco meses, cuando estaba en la cartera del ministerio de Defensa Rodrigo Rivera, se anunció para las elecciones de este año y que fue puesto en marcha el pasado 15 de octubre en cabeza del actual ministro Juan Carlos Pinzón.
 
El presidente Juan Manuel Santos aseguró que con la labor de 300 mil efectivos de la Policía y el Ejército que están desplegados en el 95 por ciento de los puestos de votación dispuestos en el territorio nacional se garantizarán que las elecciones se lleven a cabo en todo el país.

“Tengan los colombianos la plena seguridad de que nuestra Fuerza Pública va a garantizar que nuestra democracia funcione el próximo domingo”, reiteró el presidente Santos.

La atención de las autoridades estará, sin embargo, concentrada en 67 municipios, distribuidos en 23 departamentos (ver mapa costado derecho) y reconocidos como de nivel extraordinario. Allí además de mayor pie de fuerza, habrá unidades de inteligencia y de investigación judicial.
 
La identificación de dichos lugares se logró a través del Centro Integrado de Inteligencia Electoral (CI2E), que congrega a 13 instituciones del Estado, que incluye a los ministerios de Defensa, del Interior, el DAS y todas las agencias de inteligencia, así como organismos de control como la Fiscalía, la Procuraduría, la Registraduría y la Defensoría del pueblo. Y fue con visitas a los lugares, que por sus antecedentes mayor peligro presentaban, que se hicieron dos mapas de riesgo, que al cruzarse dieron como resultado dichas zonas, que por su compleja situación ameritan atención especial de las autoridades.

Uno de los mapas, el de condiciones de convivencia democrática, evaluó el riesgo a posibles hechos de violencia. Intensiones de FARC y del ELN y presencia de bandas criminales, principalmente. En el segundo, el de atención electoral, se tuvieron en cuenta otro tipo de circunstancias. En él, las denuncias hechas por delitos contra mecanismos de participación democrática fueron el fundamento. También hicieron parte de este los hechos relacionados con posible filtración de dinero de organizaciones criminales a campañas electorales y la participación en política de funcionarios.

Y aunque el panorama de violencia es evidente, este periodo electoral comparado con las elecciones regionales del 2003 y del 2007 lo ha sido menos. Según las cifras que maneja el ministerio de Defensa, de enero a octubre del 2003 se registraron a cuenta de las elecciones 155 episodios violentos (homicidios, secuestros, atentados), en el 2007, 140 y este año 104.

En lo que tiene que ver con los candidatos (este año 101.000 aspirantes), aunque unos corren menor riesgo que otros, todos cuentan con el Plan Padrino, que consiste en que cada uno tenga a su disposición un Policía permanentemente, como escolta o simplemente para efectos de contestar sus preguntas, sugerencias e inquietudes. Sin embargo, pese a que este plan fue activado desde el inicio de las campañas electorales, a pocos días de los comicios (24 de octubre) 41 candidatos han sido asesinados, según la Misión de Observación Electoral (MOE).

Entre las víctimas, 24 eran aspirantes a concejal, 15 a alcaldía y 2 a edil, según el informe de la MOE, que los presenta dentro de un conjunto de 159 "hechos de violencia política" que se han presentado desde el pasado febrero, con la apertura de la temporada preelectoral.

Por eso, a medida de que pasan las horas y se acercan los comicios el riesgo aumenta, así como el número de fuerza pública en los lugares en donde los aspirantes más han sido amenazados. La apuesta del gobierno es que todos los colombianos puedan votar.