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El alcalde de Bogotá ha invitado a votar por el Sí. | Foto: Fotomontaje SEMANA

POLÍTICA

Peñalosa está jugado por el Sí a la paz

El alcalde de Bogotá ha subido el tono de su apoyo al plebiscito, lo que contrasta con los reparos del vicepresidente Germán Vargas Lleras.

31 de agosto de 2016

Con “mega”, el mismo superlativo que usa para referirse a las obras que necesita Bogotá cuando habla de los ‘megacolegios’, ‘megaautopistas’, ‘megaobras’, en días pasados el alcalde Enrique Peñalosa se refirió a lo que para él significa el proceso de paz: tragarse un ‘megasapo’. Pero un “megasapo” que invita a tragarse. “No se trata de justificar los graves crímenes cometidos por las FARC, sino de participar de una reflexión, de olvidar y perdonar” dijo, mientras invitó a sus funcionarios a participar activa y conscientemente en la decisión del plebiscito.

El alcalde ha ido subiendo el tono de su apoyo al Sí en la refrendación del próximo 2 de octubre, y el domingo pasado, durante la apertura de la XXXVIII Caminata de la Solidaridad, lo ratificó al invitar a votar. “La solidaridad también es darle el respaldo al plebiscito”.

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Hace un par de meses, poco después de que el Gobierno y las FARC anunciaron el acuerdo sobre el cese al fuego bilateral, Peñalosa ya se había entregado en redes a favor de la paz. Aterrizando los resultados de las negociaciones al ámbito urbano, el alcalde insistió en que el conflicto armado ha golpeado a Bogotá y que más de 600.000 personas han llegado a la ciudad en los últimos diez años como consecuencia de la guerra. Por eso en redes sociales y ante los medios invitó a “todos los ciudadanos para que respaldemos cualquier mecanismo para refrendar los acuerdos de paz que logró el gobierno nacional con las FARC”.

En el mundo político, y en particular entre los sectores que defienden el Sí, el apoyo de Peñalosa al plebiscito ha causado sorpresa. No en vano, a diferencia de su antecesor, Gustavo Petro, el alcalde tiene como política no hablar de las decisiones de carácter nacional y limitarse a los temas técnicos que afectan a Bogotá. “Nos sorprendió. Él trata de no meterse en polémicas nacionales, pero esta vez vinculó la paz a las posibilidades de tener mayores recursos para la ciudad. Él tiene claro que si hay paz, disminuye el conflicto social que tanto ha golpeado a Bogotá”, dijo a Semana.com un funcionario de alto nivel de la administración distrital.

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Desde la perspectiva de la micropolítica, el entusiasmo de Peñalosa con la paz también ha sido motivo de sorpresa. Entre sectores liberales se creía que como fue elegido con el apoyo de Cambio Radical, el partido del vicepresidente, el alcalde sería igual de cauteloso que Germán Vargas Lleras con el acuerdo de paz. Pero no fue así. Vargas Lleras y Peñalosa han coincidido en temas relacionados con la infraestructura, como los 14 megaproyectos que el vicepresidente busca hacer para descongestionar las salidas de la ciudad, pero difieren en sus actitudes frente a lo acordado en la Habana. Mientras Peñalosa dijo “Le doy un Sí rotundo a la paz” en una reciente entrevista en Semana, el vicepresidente señaló el fin de semana que votará Sí, pero con prevenciones frente a aspectos estructurales de lo acordado.

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En un candente debate del martes en el Senado, Carlos Fernando Galán, vocero de Cambio Radical, increpó al ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, por criticar la posición frente a la paz del vicepresidente: “Parece que el ministro aún está sentido por el resultado de las pasadas elecciones en Bogotá”, recordando que Peñalosa contó con el apoyo de Vargas Lleras en contra de la candidatura liberal de Rafael Pardo, cercano a Cristo. Pero lo que omitió Galán en su discurso es que el alcalde que eligió su partido, en el candente debate del plebiscito, tiene niveles de entusiasmo que se acercan más a los de los liberales que a los del vicepresidente.