Juez avala preacuerdo entre Víctor Pacheco y Fiscalía

Cuatro meses detenido en la cárcel La Modelo de Bogotá, ha sido el golpe más duro para el abogado Víctor Pacheco, aquel jurista que se paseaba a sus anchas por las altas cortes y se codeaba con algunos magistrados y terminó involucrado en el más grande escándalo de la Corte Constitucional.

Fue él quien prendió la ‘mecha’ de un tema que aún no termina: el presunto recibo por parte del magistrado Jorge Pretelt de cerca de 500 millones de pesos para acompañar una tutela de Fidupetrol, la firma que pretendía ganarle un pleito a la gobernación de Casanare.

Pacheco logró que un juez le concediera la casa por cárcel. El abogado, cansado por todo lo que ha sido este largo y complejo proceso, llegó este viernes a los juzgados de Paloquemao. Ante la jueza 76 de conocimiento presentó excusas públicas por su participación en estos hechos.

"Mi tarjeta profesional hecha trizas. Ignoraba a ciencia cierta que esta conducta constituía un delito. Estoy constricto y apesadumbrado por incurrir en ella. Son muchas las adversidades que he tenido que sufrir por participar en ese comportamiento”, dijo el abogado al lamentarse de saber que no podrá volver a ejercer su profesión.

Pacheco reapareció este viernes ante un juez quien aceptó el preacuerdo al que este llegó con la Fiscalía. En esta negociación Pacheco, que aceptó el delito de tráfico de influencias, acepta la pena de dos años y cuatro meses de prisión domiciliaria a cambio de devolver 150 millones de pesos que recibió para realizar la gestión en la Corte Constitucional. También debe, como ya lo está haciendo, convertirse en el principal testigo en los procesos donde se encuentran involucrados todos los actores de esta penosa novela judicial.

El principal proceso es contra de Helbert Otero, el mayor accionista de Fidupetrol y actualmente preso por este escándalo. A juzgar por las evidencias, Otero habría orquestado toda la trama de corrupción. Él se ha declarado inocente y ha dicho que ni siquiera conoció al magistrado Pretelt.

El ente acusador logró otras evidencias que relacionan a Pacheco con un presunto enriquecimiento ilícito de 150 millones de pesos. Pacheco había recibido 100 millones de pesos por sus servicios profesionales en favor de la Fidupetrol. Pero una adición de 50 millones de pesos, se convirtió en su pesadilla pues la Fiscalía encontró que ese dinero era para hacer la gestión non sancta en el alto tribunal. Es por eso que la Fiscalía lo señaló de los delitos de enriquecimiento ilícito y tráfico de influencias.

Durante las audiencias de imputación de cargos la Fiscalía advirtió: "No es lo mismo una tutela con ‘padrino’, cuyo interesado hace agasajos a los magistrados, a una que no tiene esas ventajas para que sea seleccionada. Eso afecta el principio de imparcialidad. Las razones que determinaron la selección de la tutela fueron las que se pusieron por debajo de la mesa".

Eso fue lo que se hizo. Y fue por eso que todos los involucrados –Pacheco, Pretelt, Otero y el exmagistrado Rodrigo Escobar- terminaron en el ojo del huracán.