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Gustavo Petro y Juan Manuel Santos en una reunión en la Casa de Nariño. | Foto: Cortesía SIG. Presidencia.

FALLO

Bogotá queda en manos del presidente Santos

El presidente tendrá que ejecutar la destitución de Petro, encargar nuevo alcalde y convocar a elecciones atípicas.

18 de marzo de 2014

Luego de que el Consejo de Estado rechazara las 23 tutelas que pretendían frenar la  destitución del alcalde de Bogotá Gustavo Petro, ahora la situación de la capital está en manos del presidente Juan Manuel Santos.

El alto tribunal deberá notificar su decisión a las partes, a los que interpusieron las tutelas y a la Procuraduría, un procedimiento que se puede tardar una semana.

Surtido este trámite, el procurador Alejandro Ordóñez deberá remitir al despacho del presidente Juan Manuel Santos el fallo de destitución del burgomaestre para que este lo ejecute.

El mandatario ya dio señales de que así lo hará. Por ejemplo, en uno de sus primeros actos como candidato, que precisamente fue la suscripción de un pacto por Bogotá, Santos reiteró que actuará con la Constitución debajo del brazo, pero siempre pensando en el respeto y fortalecimiento de las instituciones. “De ahí no me saldré”, insistió.

Además, ese mismo día, dio muestras de que en Bogotá habrá nuevo alcalde, al señalar que probablemente va a tener que bailar con una nueva pareja. Estas declaraciones han dejado en evidencia que el presidente ejecutará el fallo del procurador Alejandro Ordóñez.

A partir del momento en que llegue a su despacho tendrá diez días para hacerlo, y cuando firme el decreto Gustavo Petro deberá salir del Palacio de Liévano.

Sin embargo, en ese intervalo de tiempo está la decisión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a la cual ha acudido la defensa de Petro reclamando medidas cautelares.

Si estas se producen, Santos tendrá un nuevo dilema, si acatarlas  o rechazarlas. Históricamente los gobiernos colombianos han atendido las medidas cautelares de la CIDH en materia de Derechos Humanos.

Pero en este caso la situación puede ser diferente, más aún cuando el propio Santos ha manifestado que en el caso Petro la justicia colombiana ha operado de forma evidente y se le han respetado los recursos de defensa al alcalde.

Pero más allá de este debate, Santos luego de ejecutar la destitución de Petro deberá mediante decreto encomendar un alcalde encargado y convocar a elecciones atípicas, pues la Constitución señala que si hay vacancia absoluta a más de 18 meses de la terminación del periodo, deberá elegirse nuevo alcalde para el periodo que resta. Estas elecciones deberán desarrollarse, según la ley, 55 días después de que sean convocadas.

Ya se habla que el ministro de Trabajo Rafael Pardo será quien asuma este encargo, el cual sólo duraría, en principio, hasta que el movimiento que avaló la candidatura de Petro para las elecciones del 2011 presente una terna de candidatos.

Petro fue inscrito por un grupo significativo de ciudadanos denominado Progresistas. Sus representantes, según aparece en la Registraduría, son Carlos Ossa, Consuelo Ahumada, el caricaturista Vladimir Flórez ‘Vladdo’, Daniel García-Peña, Carlos Vicente de Roux y Ana Teresa Bernal.
 
Ellos deberán pasar una terna de candidatos para que el presidente escoja quién será el encargado de la Alcaldía hasta el momento en que se convoquen las elecciones atípicas.