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Juan Manuel Santos | Foto: Archivo Semana

POLÍTICA

Primeras pistas del nuevo gabinete de Santos

Después de las elecciones, los partidos políticos y el presidente Santos definen su participación en el Ejecutivo.

18 de junio de 2014

Una nueva realidad política en la que Juan Manuel Santos no le debe su reelección a los votos de Álvaro Uribe quedó confirmada en los primeros días tras los comicios del domingo 15 de junio. Desde que obtuvo una victoria con 7,3 millones de votos (casi dos millones menos que en el 2010), el presidente ha alternado su agenda de gobierno con reuniones políticas con aquellos dirigentes que fueron determinantes para la victoria.

Uno de los temas que ha sido objeto de discusión es la conformación del nuevo gabinete. En esta primera semana de Santos como presidente reelecto, ya se ventilan los posibles nombres que aterrizarán en el gobierno.

Todo apunta a que el grupo más cercano al mandatario guardará proporción a la influencia que tuvieron los partidos políticos en la campaña, y el papel que cada uno de ellos jugó para garantizar la reelección, que estuvo algo amenazada cuando su opositor, Óscar Iván Zuluaga, ganó la primera vuelta.

En ese cálculo, el Partido Liberal podría llevarse la mayor tajada del pastel burocrático, por encima de la U, el partido que fundó el propio Santos en el 2006 (paradójicamente junto a Óscar Iván Zuluaga, entre otros dirigentes).

Semana.com conoció que Santos se sentó ya en dos ocasiones con quien fue uno de los principales estrategas de su victoria, el expresidente César Gaviria Trujillo.

En la primera, para agradecerle su papel en la campaña, y en la otra, para pedirle diseñar la política a desarrollar en este primer año del segundo tiempo de su gobierno, el cual comenzará a partir del 7 de agosto. De esas reuniones trascendió algunos de los nombres que muy seguramente integrarán el nuevo gabinete.

Es casi un hecho que el saliente presidente del Congreso, el liberal Juan Fernando Cristo, aterrizaría para dirigir la política relacionada con el posconflicto, toda vez que fue el autor y principal promotor de la Ley de Víctimas.

Aunque por su experiencia en el Capitolio -20 años como Senador-, Cristo encajaría en el ministerio del Interior, su futuro rol podría estar al frente de una nueva cartera que se crearía específicamente para manejar temas de posconflicto. Y allí podría tener cabida quien fuera su socio en la Ley de Víctimas, el representante Guillermo Rivera quien se ‘quemó’ en su aspiración de llegar al Senado.

El jefe único del Partido Liberal, Simón Gaviria, quien dirigió la campaña reeleccionista en 12 departamentos, parece tener sus días contados al frente del liberalismo. Su entrada al Ejecutivo ya se da por descontada por varias razones. Primero, Simón fue quien lideró el apoyo de los liberales a Santos en el 2010. Y segundo como un modo de reconocerle al expresidente Gaviria el decidido juego por la reelección. Lo único que falta es definir en qué área. Son dos las carteras ministeriales que se le ajustan, el ministerio de Hacienda o el de Transporte. Gaviria además está tratando de hacer buenos oficios para “dialogar” con la gente que acompañó a Óscar Iván Zuluaga.

Gina Parody llegaría a una alta consejería o recalaría de nuevo en el SENA para terminar la tarea que dejó aplazada, luego de renunciar para reforzar el equipo de campaña. Por su parte Juan José Echavarría, quien se encargó de manejar la propuesta económica de la campaña, llegaría al Departamento de Planeación Nacional.

Los amigos cercanos a Santos le han sugerido constantemente encargar a Clara López de una especie de jefatura de negociación en La Habana para reforzar el tramo final de los diálogos con las FARC y ahora con el ELN. La dirigente del Polo ha insistido una y otra vez que su futuro, más que electoral (sería la mejor carta del Polo para la Alcaldía de Bogotá), es trabajar por la paz.

Para el gobierno es prioridad que antes de finalizar el año ambos procesos estén finalizando y con acuerdos definitivos, y en caso de alcanzarlos, Clara también sería una carta en la campaña política para que los colombianos refrenden los acuerdos en las urnas, mediante referendo.  
 
El exministro de trabajo Rafael Pardo, quien renunció tras el llamado de Cesar Gaviria para reforzar la campaña, ya parece estar listo para enfrentar una campaña política. Él quiere ser el próximo alcalde de Bogotá y sería la carta de la Unidad Nacional, toda vez que en la U y en Cambio Radical no tienen opciones viables la campaña para ser el candidato a la alcaldía del Santismo, aunque a Clara López esa opción le da vueltas en la cabeza. 

Para el ministerio de educación el gobierno Santos ha pensado en el profesor Antanas Mockus, su rival en las elecciones del 2010. Santos quiere agradecerle su adhesión. Sin embargo el profesor Mockus quiere entrar a colaborar con los temas relacionados con la Paz, y su participación en el gobierno también dependería de su estado de salud.  
 
El actual presidente del Partido de la U, Sergio Díaz Granados, está pensando en repetir en la cartera de Comercio Exterior donde cumplió una buena labor al frente de las relaciones comerciales a raíz de los nuevos TLC.  Aunque también se le menciona como Ministro de Relaciones Exteriores.
 
Cambio Radical no solo tiene la vicepresidencia con Germán Vargas Lleras, un cargo en el que además tendrá mayores funciones  y relacionadas con temas de infraestructura. Y mantendrá el ministerio de Vivienda, pues esta fue la política social que más influyó en la reelección, y que podría ser de nuevo trampolín para Vargas Lleras en su camino a la presidencia. 

La participación de los conservadores en el gobierno aún no está definida. Los godos santistas aspiran a mantener la misma representación actual, tres ministerios (Hacienda, Ambiente, Agricultura), pero los otros partidos de la Unidad Nacional esperan que por cuenta de que los azules se fueron con candidata presidencial en primera vuelta, y apoyaron a Zuluaga en la segunda, de alguna forma sean castigados. 

Sin embargo, el presidente Santos no quiere romper con el ala conservadora que apoyó su candidatura. Y para ello, los conservadores santistas promueven un golpe a la Dirección Nacional del partido. Si parlamentarios como Arturo Yepes desconocen a Marta Lucía Ramírez, otros como Efraín Cepeda ya piensan en mover de la presidencia del partido a Ómar Yepes, quien también se retrató en campaña con Zuluaga. Los candidatos serían Mauricio Cárdenas (actual ministro de Hacienda) o Santiago Castro (excongresista y exdirector de la Aerocivil). 

Ese es el sonajero que empieza a agitarse. El nuevo gabinete, a diferencia del de 2010 corta de tajo cualquier relación con el uribismo y cumplirá con una máxima de la política: el que gana es el que gobierna.