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| Foto: Archivo particular

CONFLICTO

Las fichas del Gobierno para desenredar el proceso de paz con el ELN

Los exguerrilleros 'Pacho' Galán y Carlos Velandia, pese al distanciamiento con esa guerrilla, tendrán la colosal tarea de ayudar a desenredar el inicio formal de los diálogos con el Gobierno.

26 de julio de 2016

El proceso judicial que sorpresivamente inició la Fiscalía contra Carlos Arturo Velandia y Francisco Galán, exmiembros del ELN, sufrió un reversazo. Este martes, el Gobierno nombró a los dos exmilitantes elenos gestores de paz para la negociación con esta guerrilla.

Ambos exdirigentes se vuelven a encontrar de frente con su pasado. Tal como trabajaron el tiempo que estuvieron recluidos en la cárcel de Itagüí como negociadores y voceros de esa guerrilla, ahora, desde la vida civil, tendrán que ayudar a encontrar una salida que ponga a andar la negociación de paz del ELN y el Gobierno.

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Si bien los procesos penales siguen su rumbo, las órdenes de captura que tenían en su contra se levantan. Así las cosas, Carlos Arturo Velandia podrá recuperar su libertad después de que fue detenido en el aeropuerto El Dorado cuando llegaba procedente de España el pasado 21 de junio.

"Yo no creo que esa situación jurídica que estaba sucediendo tuviera que ver con una intervención del presidente, eso pasó por desconocimiento de la Fiscalía. Creo que es ignorancia. El presidente obró a tiempo y en justicia. Yo estaba asustado porque uno sabe cuándo entra a la cárcel, pero no cuándo sale", le dijo Francisco Galán a Semana.com.

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Tanto para Galán como para Velandía resultaba "incomprensible" que las órdenes de captura llegaran después de casi 13 años, cuando ambos ya habían renunciado al uso de las armas y proscrito la lucha armada.

Aunque la noticia vuelve a poner sobre la mesa la negociación de paz con el ELN, algo que había quedado relegado por cuenta de las diferencias entre esa guerrilla y el Gobierno por cuenta de espinosos temas como el secuestro, falta ver que esta fórmula tenga algún efecto.

¿La razón? Aunque ambos exdirigentes trabajaron durante los gobiernos de Ernesto Samper, Andrés Pastrana y Álvaro Uribe en busca de una salida negociada en Alemania y España, en el 2012 uno de ellos recibió un portazo de los elenos.

El 26 de marzo del 2012, a través de una aclaración pública, advirtieron que Carlos Arturo Velandia, ‘Felipe Torres‘, no tenía ningún vínculo con la organización criminal.

"Carlos Velandia no es vocero, ni representante del ELN para desarrollar ningún tipo de acción o representación política en el país o el exterior. Por lo anterior, las gestiones que en tal sentido ha realizado o realice no representan ni hacen parte de la voz ni el pensamiento del ELN. Velandia no pertenece a ninguna estructura de nuestra organización ni tiene relación con la Comandancia", dijo un escueto comunicado.

Las piezas están dispuestas. Aunque ambos exguerrilleros se dedicaban actualmente al "debate político" y -hasta donde conoció Semana.com- era poca su cercanía con la negociación, ahora se convirtieron en la estrategia del Gobierno para desenredar la negociación. Quién mejor que dos hombres que militaron por años en esa guerrilla y que conocen su funcionamiento para que aporten propuestas concretas que pongan a andar la fase pública.

Coincidencia o no, horas antes de que el nombramiento, que ya varios voceros del Gobierno habían anticipado, se hiciera realidad, el ELN manifestó estar listo para iniciar "de inmediato" las negociaciones de paz con el Gobierno.

"Reiteramos que estamos listos para cumplir lo acordado e iniciar de inmediato la ronda de conversaciones que acordamos desarrollar en Quito", dijo Nicolás Rodríguez Bautista, ‘Gabino‘. "Mientras más rápido iniciemos, con mayor prontitud se podrán abordar y buscarle solución a los temas de interés de todos", agregó.

La agenda está pactada. Los puntos que el Gobierno y el ELN discutirán en la fase pública están definidos, el problema es que ninguna de las dos partes ha conseguido instalarla y empezar la discusión. El flagelo del secuestro, el ataque a la infraestructura son dos de las situaciones que han tenido estancada la negociación.

"Después de esto vamos a reunirnos con el alto comisionado de la Paz y quizá con el presidente, quienes nos indicarán en que actividades podemos colaborar. Después de eso habrá que presentar informes y resultados, aunque todo eso es sin ánimo de lucro", puntualizó Galán.