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| Foto: EFE y AFP

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Llegó el día D para la renegociación del acuerdo de paz

Los negociadores del Gobierno se reúnen este sábado con las FARC en La Habana para socializar las propuestas de los líderes del No.

22 de octubre de 2016

Trabajaremos con celeridad para conseguir un nuevo acuerdo a la mayor brevedad”, prometió el jefe de la delegación de paz del Gobierno, Humberto de La Calle, al despedirse en la Casa de Nariño antes de viajar a Cuba a una misión bastante complicada: renegociar las 297 páginas del acuerdo que se cerró el pasado 24 de agosto en la isla.

Después de esa declaración, el equipo negociador se reunió con el presidente Santos, para definir la hoja de ruta en la nueva etapa. Revisaron y calificaron las decenas de propuestas que llegaron hasta el pasado jueves y ultimaron detalles para este nuevo intento de terminar definitivamente el conflicto, después de los resultados del plebiscito.

Desde el aeropuerto militar de Catam salieron De La Calle, Sergio Jaramillo, el exministro Álvaro Leyva y el senador Iván Cepeda con más de 60 páginas que tienen escritos los temas que serán socializados con la guerrilla para renegociar el acuerdo de paz.

La nueva etapa de negociación no será nada fácil porque hay unas ‘líneas rojas’ de las FARC que complican el margen de maniobra del ejecutivo para implementar algunas de las propuestas de los del No, aunque habrá otras que son prácticamente imposibles de tratar en la isla.

Esos puntos que las FARC se niegan a negociar son: la jurisdicción especial para la paz, la elegibilidad política, el blindaje jurídico y las penas. Casi nada. Esos pasajes son la columna vertebral de lo que se pactó y los colombianos rechazaron.

Enrique Santiago, abogado de las FARC dijo en Caracol Radio que en la renegociación no se pueden excluir esos temas ni imponer dificultades a la reincorporación de la guerrilla.

Aunque las partes están caminando al borde del abismo, no todo está perdido. De La Calle dijo que las propuestas recibidas son responsables y constructivas, aunque eso no signifique que el Gobierno esté de acuerdo con ellas. Así las cosas cabe la posibilidad de que algunos puntos específicos puedan ser retomados para reconstruir el acuerdo de paz, pero no como lo quiere el Centro Democrático, al que han acusado de dilatar las conversaciones y de presentar solicitudes inviables.

Podría haber puntos de encuentro en algunos temas específicos. “Yo creo que se va a poder incorporar mucho, hay muchas propuestas posibles y coherentes… Por ejemplo la propiedad privada, las FARC defienden la propiedad privada de la tierra para todos, eso está en el acuerdo… Eso se puede clarificar y corregir en los textos de los acuerdos para que quede claro… La supuesta sustitución de la Constitución, eso es absurdo, eso no está en los acuerdos, eso si se quiere se puede aclarar de una mejor manera”, dijo Enrique Santiago.

Cómo será el nuevo modelo de negociación

Las delegaciones volverán a un escenario al que jamás pensaron regresar. Reuniones día y noche para estudiar documentos, hacer exposiciones, escuchar las posiciones de los asesores, presiones por el tiempo, desacuerdos en temas específicos y viajes de Colombia a Cuba y viceversa.

En un principio el Gobierno viajó por ocho días, pero durante cinco años de contactos exploratorios y negociación aprendieron que la fecha de regreso al país nunca es la pactada.

La primera reunión es este sábado en el complejo de El Laguito, unas lujosas casas cubanas que la revolución le quitó a quienes vivían allí en la época del expresidente Fulgencio Batista. Aunque las partes han mantenido contacto telefónico, sobre todo el presidente Santos y ‘Timochenko’, el cara a cara será fundamental para encaminar la ruta después del triunfo del No.

El pasado 7 de octubre las delegaciones en un comunicado conjunto anunciaron que “las propuestas de ajustes y precisiones que resulten de ese proceso, serán discutidos entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP para dar garantías a todos”. Esto quiere decir que el ejecutivo, que ha sido prudente hasta ahora, también evaluará las ideas de los líderes del No y en Cuba se definirá si son aplicables o no.

El reloj corre en contra de las partes, el cese el fuego bilateral y definitivo está prorrogado hasta el 31 de diciembre, pero como dijo Humberto de la Calle “aunque ese mecanismo se esté cumpliendo no se puede ocultar que estamos en una situación frágil”.