Avanza desmonte de esquemas de seguridad

A comienzo de noviembre pasado, el director de la Unidad Nacional de Protección, Andrés Villamizar, se vio en una encrucijada de marca mayor: no tener cómo pagar a las empresas que prestan el servicio de escolta a decenas de colombianos.

El mismo día de la denuncia el tema pareció conjurado porque el Gobierno, a través del Ministerio de Hacienda, giró los 30.000 millones que se adeudaban.

Con eso las aguas bajaron y Villamizar aprovechó para informar que, desde ese momento, la entidad arrancaba un profundo plan de desmonte de esquemas a muchas personas, entre exministros, exmagistrados y sindicalistas que, según estudios de seguridad, ya no necesitaban el servicio de protección.

“El presupuesto de la Unidad Nacional de Protección (UNP) se ha triplicado en los últimos tres años, pero el crecimiento en los esquemas se ha desbordado. Por eso nos vemos en la necesidad de hacer una revisión exhaustiva para determinar quiénes aún necesitan seguridad y quiénes no. Se hace impostergable esta revisión”, dijo Villamizar entonces.

Pues bien. Este lunes, voceros de la entidad le confirmaron a Semana.com que hasta el momento se han desmontado más de 60 esquemas. La entidad se reservó los datos de las personas a las que les fue retirada la escolta porque la información, se supone, es reservada.

Según los registros de la Unidad Nacional de Protección, este desmonte, que al final de enero próximo llegará a 100, representará en costos un ahorro de 18.000 millones de pesos.

Por otro lado, la información de la UNP indica que en reducción de apoyos a viajes de funcionarios el Estado se ha ahorrado cerca de 8.000 millones de pesos en tres meses”.

Ahora la entidad avanza para determinar quiénes serán las otras 40 personas a las que le serán retirados los esquemas.

El tema es complejo pero determinante para reducir gastos en una entidad que se ha visto a gatas para funcionar.

Además de esto, Villamizar ha tenido que salirles al paso a las críticas de algunos miembros de los sindicatos de la institución que advierten que el director no ha manejado con buen tino esa compleja entidad.