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Jimmy Chamorro, senador del partido de 'la U' | Foto: Archivo SEMANA

POLÍTICA

Pago por sesión, propuesta para rebajar salario de congresistas

En diálogo con Semana.com, el senador Jimmy Chamorro anuncia que el próximo 20 de julio presentará una reforma para que los parlamentarios sólo ganen honorarios por sesión asistida. Polémica.

29 de junio de 2016

Jimmy Chamorro (La U) fue uno de los 12 congresistas que, el año pasado, firmaron el proyecto para rebajar el salario de senadores y representantes a la Cámara. El mismo proyecto que el Senado eludió.

Ahora, tras conocerse el decreto que incrementó en 7,77 % el sueldo de los parlamentarios, con el que pasarán a percibir cerca de 27 millones de pesos mensuales, Chamorro considera que es el momento oportuno para que los miembros del Congreso se “autorreformen”, y comiencen con ajustar su propio salario.

El senador de La U, en diálogo con Semana.com, reveló que el próximo 20 de julio presentará un proyecto de reforma constitucional para modificar el salario de los servidores públicos que conforman el Congreso de la República.

Su propuesta, que se anticipa polémica, pretende que a senadores y representantes no se les pague un salario mensual, sino los honorarios correspondientes a las sesiones asistidas. Es decir, pago por sesión.

Con esa fórmula, dice Chamorro, se generaría un importante ahorro a los recursos del Estado y se generaría un cambio en los perfiles de los aspirantes al Congreso, pues habilitaría a personas con un tipo de interés totalmente diferente a lo económico o salarial.

“Hoy cada congresista le cuesta al Estado cerca de 40 millones mensuales porque además de los 27 millones de sueldo, el Congreso paga tres cuartas partes de los aportes a pensión, dos terceras partes de salud, de cada congresista -dice Chamorro-. Si cambiamos el sueldo por honorarios por sesión, cada congresista deberá asumir lo correspondiente a sus prestaciones sociales”.

La propuesta se inspira en el caso de los concejales municipales o distritales del país. Estos servidores no ganan salario integral, no tienen vínculo laboral, se les paga honorarios por concepto de las sesiones asistidas, y tienen que pagar sus prestaciones sociales. Sus honorarios se determinan entre el sueldo mensual del alcalde del municipio, dividido por el número de sesiones mensuales.

Según el proyecto, a los congresistas se les pagaría como honorarios un salario mínimo mensual por cada sesión, y el número de sesiones no podrá ser superior a 20 cada mes. Eso significa que los congresistas percibirían entre 13 millones y 14 millones de pesos mensuales, en lugar de los 27 millones que aproximadamente perciben en la actualidad. “Hoy el Congreso sesiona martes y miércoles, entonces se debería pagar sólo por el trabajo de dos días a la semana -dice Chamorro-. Y los que no asistan, dejarán de percibir los honorarios por cada sesión que falten”

Con esta idea también desaparecería el sueldo que hoy devengan los congresistas en los cuatro meses al año que se encuentran en receso, como el mes entre el 20 de junio y el 20 de julio, o los tres meses entre el 16 de diciembre y el 16 de marzo.

El senador de La U dice que si el Congreso se atreve a aprobar este proyecto, tendrá consecuencias inmediatas en términos de eficiencia parlamentaria. “Será difícil cancelar sesiones por falta de quórum, el Congreso estaría más dedicado al control político y a las leyes que a la politiquería”.

La idea no es nueva. Chamorro dice que la ha venido socializando en el Partido de la U y la Alianza Verde, que presentó el año pasado el proyecto para rebajar el sueldo de los congresistas.

Admite que no va a ser fácil. Primero necesita presentarla con las firmas de otros 10 congresistas, y falta ver quién se atreve a acompañar la propuesta. Y luego, como se trata de una reforma a la Constitución, necesitará de ocho debates en el Congreso, y quién sabe si los parlamentarios se declaren impedidos para legislar sobre su propio salario.

“Sería una prueba de fuego para el Congreso. Es el momento más indicado para enviarle un mensaje positivo al país, y qué mejor que aprobando esta reforma. De lo contrario, sería una prueba de que este Congreso no tiene la mínima voluntad de reformarse”.