Los dilemas de Santos con el gabinete

El presidente Juan Manuel Santos ya definió la hoja de ruta de su segundo tiempo. Sólo le resta definir la nómina de quienes saldrán a la cancha para ejecutar sus políticas. Este lunes, según se ha dicho, se conocería toda la plantilla.

Ya cinco ministros fueron ratificados. El presidente deberá decidir entre quiénes se reparte el gabinete, la cereza del pastel de la torta burocrática.

Santos, en su gabinete de hace cuatro años, mezcló políticos, tecnócratas y uno que otro amigo personal. Ahora, cuando las facturas de la reelección andan en mano de los dirigentes políticos, la cosa parece ser diferente y Santos sacrificaría la cuota de tecnocracia.

Las cuotas y los ministerios

Antes de posesionarse, Santos había ratificado al ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, cuota del Partido Conservador; María Ángela Holguín, ministra de Relaciones Exteriores, a quien se le identifica con el Partido Liberal, y el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, hombre de la entraña de Santos pero que se le asocia al Partido de la U.

Además designó al liberal Juan Fernando Cristo ministro del Interior para reemplazar a Aurelio Iragorri (La U), quien, ahora, se desempeñará en la cartera de Agricultura, la cual había fortín político y burocrático de los conservadores por más de dos décadas, desde el gobierno de Andrés Pastrana.

En consecuencia, el Gobierno que va delineando Santos está compuesto por dos liberales, dos de La U y un conservador. Para los 11 ministerios que faltan, La U aspira a tener otros dos, lo mismo que los liberales. El tercer socio de la Unidad Nacional, Cambio Radical, tiene al vicepresidente de la República reclamando más funciones, más poder, y en el gabinete quiere tener tres ministerios.

Los conservadores aspiran al menos a otro ministerio tras perder la cartera de Agricultura. Y hasta un sector progresista que también reclama su aporte al triunfo electoral de Santos podría tener algo del gabinete.

Las pretensiones

Las circunstancias alrededor de las 11 carteras que aún falta por definir no son nada fáciles de resolver por el presidente Santos.

El Ministerio de Justicia hoy está en manos del ala samperista del Partido Liberal con Alfonso Gómez Méndez. Su permanencia está en entredicho, por los dardos que le ha lanzado el fiscal Eduardo Montealegre.

En el Partido Liberal hoy por hoy manda la ‘casa Gaviria’, y este ministerio no estaría en sus exigencias. Se menciona al exmagistrado Yesid Reyes, pero cuando Santos nombró a Gómez Méndez señaló que su experiencia sería determinante para la política de paz.

Los liberales, luego de la designación de Cristo en el Ministerio del Interior y la ratificación de la canciller, sólo pretenden que el presidente nombre a Simón Gaviria en la Dirección Nacional de Planeación, luego de que el hijo del expresidente Gaviria rechazó cuatro ministerios. Se le había ofrecido el Ministerio del Interior y el de Comercio Exterior.

La decisión más difícil para Santos se está convirtiendo en la cartera de Transporte. Hoy está ocupada por la costeña Cecilia Álvarez, respaldada por el Partido de la U. Los congresistas costeños, que son 32 en el Senado, le pidieron a Santos que los reconozca con el 40 % del gabinete, es decir, casi que seis ministerios. Algo difícil, pero entre sus peticiones sería la ratificación de Álvarez.

Pero la cartera de Transporte, que tendrá los retos en infraestructura, es una de las peticiones de Vargas Lleras por su lealtad con el presidente. Este pulso lo ganaría este último y se menciona que Natalia Abello, actual secretaria de Gobierno de Barranquilla, la cual es de Cambio Radical, podría ser la cuota de Vargas en el gabinete. Si Álvarez no es ratificada, podría pasar a la cartera de Comercio Exterior.

El partido de Vargas Lleras mantendrá con toda seguridad el Ministerio de Vivienda con Luis Felipe Henao. Y también aspira a la cartera de Ambiente, que actualmente está en manos del Partido Conservador.

Carteras en juego

Aún son incógnitas los ministerios que hoy tienen los liberales: Minas, que hoy está en manos de Amílkar Acosta; el de Salud, con el también liberal Alejandro Gaviria; Diego Molano, ministro de las TIC y calificado como de los mejores del gabinete, abandonaría el gobierno por voluntad propia, y el de Trabajo.

También saldrían la ministra de Educación, María Fernanda Campo, y la de Cultura, Mariana Garcés. Suenan como relevos Gina Parody, en Educación, y David Luna, en Trabajo. Todos estos son los dilemas que Santos tendrá que resolver parea definir la alineación titular para el segundo tiempo.