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El joven estudia Comunicación Social y Periodismo, igual que su víctima. | Foto: Fotomontaje SEMANA / Archivo particular

INVESTIGACIÓN

Este es Sebastián Pedroza, el presunto agresor de María José Rivas

El hombre está señalado de haberle dado un mordisco al rostro de la modelo y estudiante universitaria, a la que le suturaron 42 puntos.

26 de mayo de 2015

“Este joven no solamente cometió un delito, sino que se comportó como un animal”. La dura frase es de un alto funcionario de la Fiscalía en respuesta a la denuncia interpuesta por la modelo y estudiante de Comunicación Social María José Rivas, que señala a su exnovio Juan Sebastián Pedroza Hincapié de haberla agredido brutalmente: la mordió en el rostro y le dejó una profunda herida para toda la vida, según manifestó la víctima.

Ella le contó su dramática historia a Semana.com este lunes y la Fiscalía tomó las primeras acciones. El despacho del vicefiscal general delegó este martes al director nacional de Fiscalías para que asumiera el caso y lo resolviera no en días, sino en horas.

La decisión se tomó después de que el ente acusador verificó la denuncia interpuesta por María José contra su agresor. El delito que habría cometido el joven es el de lesiones personales, según denuncia la agredida.

Sin embargo, y según las normas, la lesión no da para una orden de captura, pues Medicina Legal certificó una incapacidad de 20 días para la víctima. Una posible detención se da si esta sobrepasa los 30 días.

Otros juristas aseguran que la Fiscalía, no obstante, debe evaluar si hay o no un intento de fuga o algo parecido, para determinar si es capturado o no.

“De todas maneras se trata de una lesión muy grave que debe ser evaluada por los fiscales”, dijo un abogado penalista. La Fiscalía evaluará en la tarde de este martes el tema para evaluar cuál es el camino. Lo cierto es que, hasta el momento, Sebastián Pedroza no tiene requerimiento alguno.

La historia

“Él tenía que hacerme daño para poder dejarme tranquila. Me golpeó frente a mucha gente, nadie hizo nada, y cuando intenté soltarme, me mordió la cara y me quitó un pedazo de mejilla. Estaba muy asustada”. Las dolorosas palabras son de María José, que aspiraba perseguir una carrera en el modelaje y transitar de las pasarelas al Reinado Nacional de la Belleza.

Hoy esos sueños están frustrados, por ahora, después de la brutal agresión de su exnovio. El joven, en una noche en la que le pudieron más los celos que la cordura, la golpeó a las afueras de una discoteca en la capital, la mordió en la cara y le dejó una herida que le valió una sutura de 42 puntos.

El ataque se hace público gracias a Noticias Caracol, apenas un mes después de que el país conoció la conmovedora recuperación de Natalia Ponce de León, y cuando se busca que en Colombia las mujeres no callen más las agresiones de las que son víctimas.

Semana.com habló con María José, que contó su dura historia: “Él llegó a la discoteca porque tenemos amigos en común. En algún momento salimos y empezó a golpearme, me estaba pegando muy duro, me cogió de los brazos y cuando intenté soltarme, levanté la cara y me mordió”.

Su relato se hace cada vez más desgarrador: “Yo pensé en ese momento que me había mordido con rabia y que tenía un morado, pero cuando me soltó me vi en un espejo y salía mucha sangre. Fui a la clínica Santa Fe y me tuvo que atender un cirujano plástico”.

De acuerdo con su denuncia, todo se trataría de un caso de celos. La pareja había terminado recientemente una relación de dos años en los que, como todo noviazgo, hubo algunos inconvenientes menores. “Yo creo que es un ataque de celos porque no le veo otro nombre. Si tú estás tranquila con tus amigas y llega un hombre a pegarte como si nada, sin motivos, eso es”, relató María José.

Según la joven, “mi familia y yo queríamos conciliar, pues lo conocemos hace mucho tiempo. Pero su familia nunca quiso hacerlo. Desde el ataque él no se ha comunicado conmigo”.

Según la información inicial, Juan Sebastián Pedroza Hincapié estaría relacionado con un exmagistrado que fue presidente del Consejo Nacional Electoral. Así mismo, tendría familiares en la Secretaría de Salud de la ciudad.

Pero, más allá de una pelea de novios, es un doloroso caso que llama a la reflexión en un país que está buscando la reconciliación. Además, urge el accionar de las autoridades para que procedan con severidad y sin vacilaciones frente a este tipo de repudiables hechos.

“Él anda por ahí, campante en la calle. Sale todos los días y los fines de semana publica fotos. No sé qué puedo esperar de él, nadie ha sido capaz de controlarlo”, concluye la adolorida joven.