¿Presiones indebidas en la ‘Bogotá Humana’?

Desde los primeros días cuando el exalcalde Gustavo Petro convocó a movilizaciones en la Plaza de Bolívar contra su destitución e inhabilidad, varios rumores corrieron en el sentido de que a los empleados Distritales eran obligados a asistir a esas citaciones.

Todo parecía, en principio, un simple rumor que fue cogiendo fuerza en los organismos de control a donde llegaron evidencias. El personero de Bogotá, Ricardo María Cañon, fue el primero en denunciar estos hechos. Este miércoles, Cañon volvió a la carga contra algunos funcionarios del Distrito a quienes señaló de aprovecharse del cargo para presionar a sus subalternos para que asistieran a esos mítines.

“Siguen siendo servidores públicos porque no han entregado formalmente sus puestos, así que deben atender sus funciones y cumplir con la Constitución”, dijo Cañon.

Según el secretario, en algunas entidades distritales se estaría generando un atrincheramiento contra el funcionamiento de la nueva Administración Distrital, y dejó entrever que los empleados estarían siendo presionados para que se constituyan en “resistencia” frente a la administración encargada.

Pero el cuento va más allá. Semana.com investigó el asunto y logró hablar varios funcionarios que pidieron la reserva de su identidad. Uno de ellos labora en el sector salud y aseguró que el secretario Aldo Cadena es uno de los que les a los gerentes de los hospitales que ordenen a sus empleados asistir a las convocatorias del exalcalde Gustavo Petro.

Según la fuente, la citación es más informal de lo que parece y todo se hace voz a voz. Asegura que las citaciones llevan consigo una advertencia: “La asistencia a cada convocatoria da dos puntos, los cuales son sumados al final del año y determinarían la continuidad de una persona en la entidad”.

Los más perjudicados son los que trabajan en el Distrito bajo la modalidad de prestación de servicios. La mayoría de estas personas asiste a todas las convocatorias de Petro, para sumar de a dos puntos. ¿Qué pasa si no van? “les restan esos dos puntos”, asegura el funcionario. “Faltando pocos días para que se les venza el contrato, suman los puntos de cada persona y los que tengan menos, simplemente no les renuevan el contrato”.

El funcionario, quien trabaja en el distrito desde hace 35 años, asegura que ha visto pasar 16 alcaldes y que, hasta ahora, nunca había visto tanta presión como en la administración de Petro”.

Otra de las situaciones a las que se estarían enfrentando las personas que decidan no asistir a las movilizaciones es el rechazo de sus jefes que, dice la fuente, puede llevarlos a renunciar. “Si Petro se va se quedan sin trabajo”, les dicen constantemente a los empleados.

Una de las pruebas sería que este jueves hay una asamblea de territorios de la Secretaría de la Salud en el Coliseo El Salitre, en la que le rendirán cuentas a la ciudad. Por lo que contrataron cuatro buses que saldrán de Zona Franca, CADE de Fontibón, del barrio San Pablo y otro cerca de Coca-Cola. “Los buses van pagados por el Hospital, para montar gente y funcionarios que aprovechen la excusa de la asamblea y van a hacer política 'pro-Petro', cualquiera que vaya infiltrado podrá ser testigo de ello”, concluyó la fuente.

Semana.com habló con el secretario de Salud, Aldo Cadena, quien negó cualquier tipo de presión a sus subalternos. “Rechazo cualquier tipo de presión. Si es cierto que los gerentes de los hospitales están presionando, sería una actitud reprochable digna de sanción. Yo nunca he presionado a nadie”, explicó Cadena.

Por otro lado, el secretario afirmó que todos los empleados Distritales tienen derecho a diferentes simpatías y que ninguno debe ser presionado. De ser así, señaló, deben hacer una denuncia formal para que se investigue a los involucrados.

El funcionario consultado por Semana.com dijo que el fenómeno no pasa solo en el hospital en el que trabaja, sino en todos los hospitales del Distrito y que por su antigüedad conoce a muchos empleados de otras entidades públicas en las que también sucede lo mismo.

En todo caso, la Personería ha recibido decenas de llamadas de empleados públicos que se quejan de lo mismo. El personero recordó que los funcionarios públicos no deben hace uso de sus potestades para apoyar causas distintas a las debidas. Los organismos de control tienen la palabra.