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“No hemos cambiado la posición tradicional de colombia sobre palestina”

POLÍTICA EXTERIOR

"Tenemos que abrir este país"

La canciller María Ángela Holguín explica los alcances y resultados de los viajes del presidente Juan Manuel Santos al Asia, Naciones Unidas y Canadá.

24 de septiembre de 2011

Las últimas dos semanas han sido particularmente intensas para la diplomacia colombiana. Después de que, en una primera fase, los esfuerzos del gobierno de Juan Manuel Santos se concentraron en la normalización de las relaciones con los países vecinos -en especial, con Ecuador y con Venezuela-, el presidente y su canciller, María Ángela Holguín, lanzaron una ofensiva de visitas y contactos en otros continentes. En cuestión de semanas, Santos y Holguín han estado en Serbia, Japón, Corea, Naciones Unidas y Canadá, y las presentaciones del presidente ante la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU coincidieron con el debate sobre la solicitud de Palestina de ser reconocida como un Estado autónomo y pleno. El hecho de que Colombia forme parte del Consejo generó una mayor atención sobre la posición colombiana en la materia.

En diálogo con SEMANA desde Nueva York, luego de una semana de contactos, reuniones y presentaciones, la canciller hace el balance de sus últimos encuentros con líderes extranjeros.

SEMANA: ¿Por qué se apartó Colombia de su tradicional apoyo a Palestina?

MARÍA ÁNGELA HOLGUÍN: No nos hemos apartado de la posición tradicional de Colombia. Continuamos apoyando, como hemos hecho siempre, el derecho a la libre determinación del pueblo palestino y también la coexistencia de dos Estados, Israel y Palestina, con paz y seguridad como producto de una negociación directa entre las partes. Ningún gobierno de Colombia ha reconocido el Estado palestino, precisamente porque buscamos soluciones duraderas para promover el bienestar y desarrollo de ambos pueblos. Lo que creemos, y no estamos solos, es que hay que preservar condiciones para la negociación directa.

SEMANA: Pero la mayoría en la ONU apoya la solicitud de Palestina. En América del Sur lo hacen todos, menos Colombia. ¿No es quedarse en una posición tan minoritaria, justo cuando Colombia se ha acercado a la región?

M.A.H.: Todavía los escenarios no son claros. Hay un proceso que se inicia en el Consejo de Seguridad, a solicitud de Palestina, y otro que probablemente se llevará a cabo en la Asamblea General. Debemos esperar a ver los textos de las resoluciones en uno y otro lugar, antes de tomar una decisión final. Eso mismo harán algunos países en América Latina y el Caribe, así como otras regiones del mundo. En 1947, la abstención de Colombia en la resolución 181, que estableció la llamada partición, fue la correcta. El tiempo nos ha dado la razón. Cualquier solución definitiva entre Israel y Palestina les pertenece a ellos y solo ellos pueden negociar una fórmula para vivir en paz y con fronteras seguras.

SEMANA: ¿Pero acaso Colombia no anunció ya su abstención en el Consejo de Seguridad?

M.A.H.: No. Esa fue una interpretación de algunos medios, pero yo no lo he dicho. Hay que esperar los textos que se presenten y el desarrollo del proceso. Ni siquiera se sabe con certeza si habrá votación.

SEMANA: Pero, por ejemplo en elecciones futuras, como la de Eduardo Cifuentes en la CPI, ¿no será más difícil lograr votos a favor de Colombia después de asumir una posición tan minoritaria?

M.A.H.:
Cada candidatura tiene sus propios retos. Sabemos que esta, la de la Corte Penal Internacional, no será fácil por la dinámica de canjes de apoyos y votos, pero haremos todo lo que esté a nuestro alcance para tener éxito.

SEMANA: Cambiando de tema, ¿qué resultados concretos dejó la visita del presidente Santos a Japón y Corea?

M.A.H.:
El balance del viaje al Asia fue muy positivo. Se abrieron oportunidades de negocios, inversión y comercio para Colombia. Con Corea consolidamos nuestra alianza estratégica y ya estábamos en mora de hacerlo.

SEMANA: ¿Estamos ahora más cerca del ingreso a Apec, la principal organización del Asia Pacífico?

M.A.H.: No creo que el ingreso a Apec se vaya a dar por ahora, pues existe una moratoria y no están recibiendo nuevos países. La mayoría de sus miembros nos han expresado su apoyo, pero debemos esperar el levantamiento de la moratoria. Mientras tanto, seguimos en siete grupos de trabajo y continuaremos afianzando las relaciones bilaterales con sus miembros. El levantamiento de la moratoria no depende de nosotros, sino del consenso de los miembros de Apec.

SEMANA: Y en Canadá, ¿cuál fue el balance?

M.A.H.:
En Canadá, el presidente se reunió con empresarios que quisieron hacerle un reconocimiento como el Hombre del Año, por su trayectoria. Fue importante dar testimonio de los avances del país en todos los campos.

SEMANA: ¿Cuál es el propósito de una agenda diplomática tan intensa?

M.A.H.: La agenda diplomática busca insertar al país en los flujos económicos, comerciales y diplomáticos del sistema internacional. Cambiar la imagen de Colombia y explicar sus inmensos potenciales requiere de presencia activa. Y eso estamos haciendo.

SEMANA: ¿Ha encontrado receptividad?

M.A.H.: Nos han dado la bienvenida, han mostrado interés y este año hemos visitado varios países por primera vez, y hemos recibido delegaciones de todos los rincones del mundo. Es un trabajo que debemos hacer todos los días.

SEMANA: El presidente se mostró muy complacido por la aprobación del TAA en el Senado de estados Unidos. ¿Se desbloqueó el TLC?

M.A.H.: Seguimos trabajando por el TLC, cuya aprobación obedece a un proceso soberano interno que respetamos. Por supuesto, esperamos que en las próximas semanas sea adoptado.

SEMANA: ¿No le parece que el presidente está viajando mucho? A usted le toca, pero al presidente también le toca manejar los problemas internos, que son muy complejos...

M.A.H.:
No creo que el presidente viaje mucho. Tenemos que abrir este país al mundo. Un viaje del presidente mueve y dinamiza muchos temas y negociaciones cruciales para Colombia. Lo que un presidente logra con un viaje, los ministros lo logramos en varios. Hay que salir, hay que mostrar las transformaciones de Colombia. Y nadie mejor para hacerlo que el presidente de todos los colombianos.