Tutelazo a elecciones atípicas en el Valle

Un inesperado giro podría sufrir el llamado a elecciones atípicas en el Valle del Cauca convocadas para el próximo domingo 1 de julio y en las que se pretende elegir nuevo gobernador del Valle, tras la suspensión del titular, Héctor Fabio Useche.

Así lo pudo establecer SEMANA tras conocer que el líder indígena caucano Jesús Piñacué interpuso una tutela desde el pasado lunes 28 de mayo, que podría ser admitida por el Tribunal Contencioso Administrativo del Valle. SEMANA consultó ante ese despacho y lo único que pudo obtener es que la tutela está a la espera de reparto.

Si bien Piñacué es de Cauca, desde hace varios años vive en Cali y con base en ello puede demostrar su arraigo en el Valle para aspirar al cargo de gobernador. Aunque hace unas semanas buscó el aval a través de su partido ASI, finalmente no lo consiguió.

Según explicó Pedro Luis Barco, exasesor del exalcalde de Cali Jorge Iván Ospina y quien coordina junto a Piñacué la acción judicial, "con ella se busca hacer valer su derecho a elegir y ser elegido".

Explicó que el lío radica en el poco tiempo que concedió el gobierno nacional en el calendario para esas elecciones atípicas, "en el Decreto que las convoca tan solo concede 17 días para realizar inscripciones", precisó el señor Barco.

Agregó que ese calendario tan apretado eliminó de tajo la posibilidad de que candidatos independientes avalados por firmas tuvieran la oportunidad y el tiempo necesarios para recoger las rúbricas, "tal como están las cosas, a esas elecciones sólo pueden aspirar candidatos avalados por partidos", argumentó.

Como se recordará, la Contraloría sancionó fiscalmente al mandatario Useche, lo que motivó la suspensión del cargo. Posteriormente, y ante conceptos del Consejo de Estado en el sentido de que la falta de Useche es absoluta y no temporal, el entonces ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, expidió el Decreto 0930 del 4 de mayo del 2012 en el que convocó a elecciones atípicas para el 1 de julio. Es decir, los partidos y aspirantes quedaron con un plazo de sólo dos meses para realizar sus campañas.

Ese corto tiempo es el que reclamó Piñacué en la tutela, no sólo porque impide que aspirantes independientes puedan recoger las firmas, sino que además elimina de tajo otra manifestación democrática como lo es la promoción del voto en blanco.

En Valle esa tendencia por el voto en blanco la lidera Jaime Sierra, exveedor público también durante la administración del entonces alcalde Jorge Iván Ospina. A él se han sumado otros líderes de opinión de Cali, pero sin votos o que nunca se han hecho contar en las urnas.

El cierre y la modificación de inscripciones para las elecciones atípicas del Valle venció el pasado lunes y en el partidor de aspirantes quedaron sólo tres candidatos: el exsenador conservador Ubéimar Delgado, cuyo nombré salió de un consenso de siete partidos de la Unidad Nacional (Liberal, La U, Conservador, Cambio Radical, Verde, AICO, ASI).

Si bien Delgado fue el elegido, en la base de los partidos causó mucha molestia la manera como se llegó a su nombre y en especial porque ni diputados o concejales fueron consultados. Muchos temen que esa situación cause grietas en la unidad y que al final el día de la elección no exista disciplina dentro de los partidos.

El gran contendor de Delgado sin duda es Francined Cano, un administrador de empresas avalado por el Movimiento de Inclusión y Oportunidades (MIO). Cano es considerado la ficha de los polémicos dirigentes el exsenador condenado por parapolítica Juan Carlos Martínez Sinisterra y el exgobernador destituido del Valle, Juan Carlos Abadía.

Lo extraño es que Cano, oriundo de Buga, era hasta el año pasado una de las fichas políticas de la senadora Dilian Francisca Toro, dentro del partido de La U. De hecho, fue candidato a la Alcaldía de Buga en el 2011 y en el 2010 aspiró a la Cámara de Representantes, en ambas elecciones se quemó y lo hizo avalado por La U.

Y el tercer aspirante es Carlos González, quien cuenta con el aval del Polo Democrático Alternativo. En Valle González tiene el respaldo de la estructura política que maneja el senador Alexánder López.

Si la tutela finalmente es admitida y falla a favor de Piñacué, lo más probable es que ese partidor se abra, entren nuevos aspirantes avalados por firmas y el voto en blanco que tantas veces se ha mencionado en la contienda, empiece a tomar forma y peso. Amanecerá y veremos.