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1.Policías de Argentina y Perú durante un curso de comando de operaciones especiales -Copes-.

POLICÍA NACIONAL

Una escuela ejemplar

Colombia tiene un nuevo 'producto' de exportación: el entrenamiento policial. En dos años, 8.000 agentes de 28 países han pasado por sus clases.

19 de febrero de 2011

Colombia tiene un 'producto' de exportación que no figura en ningún reporte ni en las estadísticas de comercio: el entrenamiento de policías. Las lecciones de más de 30 años de luchar contra el narcotráfico, el secuestro y la guerrilla le han permitido a la Policía Nacional adquirir una experiencia que pocas fuerzas en el mundo pueden exhibir. Esto ha convertido a los colombianos en un referente internacional: en los últimos años han entrenado a casi ocho mil miembros de las policías de 28 países, incluidos Francia, India e Israel y todos los de Latinoamérica, con la única excepción de Cuba.

Cada país solicita a la Policía Nacional capacitación en diferentes áreas, según sus necesidades. México es uno de los que más ha acudido a solicitar entrenamiento para enfrentar dos fenómenos delincuenciales que tienen azotado a ese país, el narcotráfico y el secuestro. Hace un año, 80 policías colombianos viajaron a México para preparar a 4.336 miembros de la Secretaría de Seguridad, en cursos para mandos medios, elaboración de perfiles de investigación y criminalística. En el estado de Morelos, 30 policías fueron entrenados por miembros del Gaula en antiextorsión y secuestro. En Jalisco, la Dirección de Inteligencia (Dipol) y los comandos Jungla de la Policía antinarcóticos dictaron cursos de inteligencia a un número similar. Otros 1.400 mexicanos viajaron a Colombia para ser capacitados en el Centro Nacional de Operaciones de la Policía, en El Espinal, Tolima, en especialidades como tirador de alta precisión, enfermero de combate, técnicas de reconocimiento, entre otras.

El entrenamiento en lucha contra la extorsión y el secuestro es uno de los 'productos' más solicitados por países como Paraguay y Honduras. En este último, por ejemplo, aparte del entrenamiento, el Gaula de la Policía ha participado en el rescate de secuestrados. A petición de las autoridades allá, el año pasado los colombianos rescataron a 17 hondureños, entre ellos Filiberto Moya Lobo, primo del presidente.

Los cursos que dicta la Dijín en la lucha contra el lavado de activos, técnicas de policía judicial, antiexplosivos, seguridad para transporte de hidrocarburos y seguridad ciudadana, entre otros, son algunos de los más solicitados por países como Brasil, Ecuador, Perú, Belice, Costa Rica, Honduras, El Salvador, Guatemala y Nicaragua, entre otros.

Pero no solo desde la región envían policías a Colombia a recibir entrenamiento. Desde el otro lado del mundo también vienen a recibir clases. Agentes de Afganistán y de la India fueron capacitados en la lucha antinarcóticos. Oficiales de Togo, Guinea, Cabo Verde han viajado para recibir entrenamiento en inteligencia y contrainteligencia. Franceses y japoneses han recibido capacitación en técnicas forenses. Alemanes y australianos, capacitación en antinarcóticos.

Entre 2009 y 2010, 7.895 policías de 28 países fueron entrenados por policías colombianos. La cifra habla por sí misma sobre el producto de exportación menos conocido de Colombia.