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Álvaro Uribe y Timochenko. | Foto: Archivo SEMANA

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Cita Uribe-FARC: ¿progreso a la vista?

El expresidente sorprendió al mostrarse dispuesto a reunirse cara a cara con la guerrilla, algo que había descartado en los primeros días del diálogo con el Gobierno.

19 de octubre de 2016

Muchas de las señales del diálogo entre el Gobierno y los promotores del No después del resultado del plebiscito del 2 de octubre, especialmente con el sector que representa el Centro Democrático, no han sido muy prometedoras. Después de que el expresidente Álvaro Uribe y el presidente Juan Manuel Santos se reunieron por primera vez en seis años, apenas tres días después del rechazo de las urnas a refrendar los acuerdos y antes de que se conociera la noticia del Nobel de Paz, no se han vislumbrado muchos avances en las conversaciones.

Cuando a pesar de los reiterativos pedidos de celeridad del presidente todo parecía empatanado, el senador Uribe abrió la puerta a reunirse con representantes de las FARC para destrabar el proceso de paz, una posibilidad que antes habían descartado desde el Centro Democrático, pues sostenían que esas eran atribuciones de los negociadores del Gobierno.

“Se necesita un gran pacto nacional, totalmente incluyente. Si para este pacto compañeros nuestros o nosotros tuviéramos que hablar con las FARC, además de hacerlo con el Gobierno, estaríamos dispuestos a hacerlo”, soltó Uribe el martes en el marco de la plenaria del Senado.

Contrario a lo que muchos especularon en su momento, esa reunión clave entre voceros del No y representantes de las FARC no se daría en La Habana, sino que se está pensando en traerlos a Bogotá, con la gestión de un mediador que podría ser algún representante de Estados Unidos.

Washington ha apostado decididamente por las negociaciones de La Habana y le interesa evitar que naufrague ese esfuerzo de cuatro años. Como se sabe, el presidente Barack Obama tiene un enviado especial para el proceso de paz, Bernie Aronson, y el secretario de Estado, John Kerry, tendió puentes con la oposición tras el resultado del plebiscito al agradecerle a Uribe su “compromiso con la paz”. 

Sin embargo, la declaración de Uribe en el Senado fue antes de la alocución del lunes en la noche del presidente Santos, cuando puso un plazo para recibir propuestas del No hasta este jueves. 

Ese anuncio fue muy mal recibido por el jefe del Centro Democrático, que lo interpretó como un ultimátum, lo calificó como un “chantaje” y se despachó en una larga serie de mensajes en Twitter, una vez más, contra Santos. Está por verse si la molestia es tan profunda como para descarrilar la reunión que ya se cocina con representantes de las FARC, que sería el avance más concreto para superar el limbo reinante desde que triunfó del No en el plebiscito.

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