CONFLICTO ARMADO

Con condiciones, Gobierno no se opone al acuerdo humanitario

El presidente Álvaro Uribe habló telefónicamente con el soldado Josué Daniel Calvo.

28 de marzo de 2010

Desde Arauca, donde se adelantó un consejo de seguridad, el presidente Álvaro Uribe celebró la liberación del soldado Josué Daniel Calvo y habló sobre los llamados para que el Gobierno acepte un acuerdo humanitario.

El mandatario sostuvo que el Gobierno “ha facilitado liberaciones, ha hecho rescates y no se opone al acuerdo humanitario”, siempre y cuando dicho proceso “no sea para devolverles delincuentes a las Farc”.

De acuerdo con el Jefe de Estado, la condición para lograr un acuerdo humanitario es que aquellos integrantes de las Farc que lleguen a salir de la cárcel, no regresen a delinquir.

“No podemos hacer un acuerdo humanitario para devolverles delincuentes a las Farc, que les fortalezcan su capacidad criminal”, dijo Uribe.

Agregó que aquellos que resultaren beneficiados en el marco de un proceso de este tipo deben dar todas las garantías. “El acuerdo humanitario no es para fortalecer el terrorismo, sino para liberar a los colombianos de la pesadilla de las acciones terroristas”, subrayó.

Al hablar sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo de paz con las Farc, Uribe reclamó primero de la guerrilla buena fe y suspender todos sus actos criminales.

“Avanzar en acuerdos paz en medio de carros bomba es inclinarse ante el terrorismo, sin conseguir la paz. Por eso invito a todos mis compatriotas a reflexionar sobre la necesidad de que lo primero que se necesita para un acuerdo de paz, es buena fe”, sostuvo.

Y se preguntó: “¿Cómo vamos a hablar hoy de acuerdos de paz con el carro bomba de Buenaventura o con estos hechos de aquí de Arauca? Que el terrorismo dé señales de buena fe”.

La senadora Piedad Córdoba sostuvo que esta semana Colombianos y colombianas por la paz le entregarán al presidente Álvaro Uribe una propuesta por el intercambio humanitario, con la cual se pueda poner fin al secuestro de los más de 20 uniformados que continúan cautivos.