| Foto: Natalia Botero

CONFLICTO

Cruz Roja advierte sobre víctimas "invisibles" del conflicto

En Colombia hay 3,3 millones de desplazados, cuyo padecimiento no sale a la luz pública, según el CICR.

Alianza BBC
26 de abril de 2010

En su informe anual sobre Colombia, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) advirtió este lunes que el conflicto armado en ese país -que ya cumple cuatro décadas- sigue causando sufrimiento a la población civil y que sus víctimas están en riesgo de ser olvidadas porque la mayoría de sus tragedias no salen a la luz pública.

El reporte afirma que los desplazados son casi "invisibles" en las zonas rurales.

Después de Sudán, Colombia es el país con más desplazados internos del mundo: 3,3 millones de personas, es decir el 7,3% de su población.

Según explicó a BBC Mundo Marçal Izard, portavoz de la oficina central del CICR en Ginebra, la cifra de desplazados aumenta cada año porque la gran mayoría de ellos no regresan a sus hogares.

De acuerdo con datos oficiales, sólo un 4% de ellos vuelven al lugar que abandonaron.

Los casos no se reportan, explica Izard, porque las víctimas civiles se dirigen a zonas alejadas donde no hay infraestructuras y los medios de los medios de comunicación no suelen llegar.

Invisibles

Según el informe, el enfrentamiento entre el gobierno y la guerrilla se ha trasladado a las zonas más remotas. Esto no significa, sin embargo, que haya disminuido el número de víctimas.

Lo que sucede es que los incidentes no salen a la luz pública. El sur y la costa pacífica son las regiones más afectadas y las comunidades indígenas las más vulnerables, pues dependen de sus tierras para vivir, explicó Izard.

Muchos de los desplazados viven inadvertidos en diferentes zonas de Antioquia, Arauca, Caquetá, Cauca, Chocó, Córdoba, Guaviare, Huila, Meta, Nariño, Putumayo, Tolima y la región del Catatumbo.

El año pasado, los delegados de la Cruz Roja registraron 800 casos de presuntos abusos de los derechos humanos como asesinatos, violencia sexual, secuestros y desapariciones forzadas.

El CICR advierte que en algunas regiones los combates se han recrudecido de cara a las elecciones presidenciales que se celebran en Colombia el 30 de mayo.

Amenazados

La intención del organismo es visibilizar el problema y "poner en evidencia que el conflicto no está acabado".

"Bajo amenazas de muerte, se fuerza a la población a huir", afirmó este lunes el responsable de la delegación colombiana de la Cruz Roja, Christophe Beney, quien agregó que también se cometen asesinatos, se hiere a personas y se perpetran actos de violencia sexual.

"Y lo peor es que estas tragedias no salen a la luz pública", lamentó.

Los delegados de la Cruz Roja registraron en 2009 unas 800 violaciones del Derecho Internacional Humanitario, entre los que se incluyeron 28 casos de homicidio.

Para Beney, las violaciones "más preocupantes" son las ejecuciones de los "falsos positivos", como se conoce en Colombia a los civiles presuntamente asesinados por las fuerzas de seguridad, que los presentan como guerrilleros muertos en combate.

También denunció el reclutamiento de menores por los grupos armados, lo que se explica en parte debido al alistamiento forzado y en parte a que los jóvenes campesinos no encuentran otras posibilidades de futuro.

El CICR alerta, asimismo, sobre los riesgos que representa para la población civil el que acciones militares o políticos se disfracen como acciones humanitarias.

Reacción oficial

Ante el informe anual del organismo, el ministro de Defensa de Colombia, Gabriel Silva, dijo que buscará una reunión con Christophe Beney.

Luego de que se conoció el documento, según el cual algunos operativos militares se presentan como acciones humanitarias, Silva dijo: "Muchas operaciones, por ejemplo en el Cauca, se han tenido que suspender porque los narcoterroristas utilizan a la población civil para esconderse en las escuelas, casas, hospitales y nosotros preferimos no tener una victoria militar a violar el Derecho Internacional Humanitario".

"La doctrina militar de Colombia se construye sobre el Derecho Internacional Humanitario y la protección de los civiles", agregó el ministro.

En su discurso, Silva afirmó que el gobierno se opone "a la ligereza con que se manejan los asuntos de la fuerza pública, y cómo el llevar uniforme muchas veces para algunos significa que se es ya un condenado".