Neiva y su periferia, ha sido golpeada en varias ocasiones por las acciones de los grupos violentos, en especial por los cometidos por la 'Teófilo Forero' de las Farc.

CONFLICTO

Nuevo ataque de las Farc prende las alarmas en Neiva

La columna 'Teófilo Forero' atentó contra el Club Los Andaquíes donde se tenía programado un encuentro de concejales esta semana. Investigadores advierten sobre un reacomodo de la guerrilla en la zona.

7 de diciembre de 2009

No había pasado ni siquiera un mes desde que un petardo acabó con la fachada de la edificación en la que se construirá el Concejo de Neiva, cuando los huilenses esta madrugada despertaron con otra bomba que, a las 3 de la mañana, estremeció las afueras de la ciudad frente al Club Los Andaquíes, donde a partir de este miércoles se realizará un encuentro nacional de concejales con autoridades que van desde los ministros de Defensa y del Interior, hasta el Presidente de la República.

Desde luego el ataque no es azar. Las autoridades tienen indicios de que la columna ‘Teófilo Forero’ de las Farc es la autora del atentado, un grupo que históricamente ha campeado por esta región y se ha ensañado especialmente con los concejales de este departamento (desde hace varios meses, mantienen secuestrado al concejal Armando Acuña, del municipio de Garzón).

A las 3:55 de la mañana, la bomba estalló en la que también es la sede social de la Universidad Cooperativa de Colombia, donde la Federación Nacional de Concejales, Fenacon, decidió organizar el encuentro de conejales en solidaridad con los colegas del departamento que han sido víctimas de la violencia.

“Fue una explosión de bajo poder que obviamente causó daños en la garita donde había un vigilante y éste salió herido”, le dijo a la agencia AP el coronel José María Lozada, comandante encargado de la policía en Huila. Poco después de ese incidente, la policía descubrió en una avenida cercana al club dos cilindros de gas rellenos con al menos 100 kilos de explosivos, que desactivó.

Desde hace más de dos meses, Huila, y en especial Neiva, ha tenido que soportar una seguidilla de atentados de los grupos ilegales. Después de que la bomba destruyó parte del edificio de los concejales a mediados del pasado noviembre, personal antiexplosivos alcanzaron a desactivar otra bomba ese mismo día.

De ahí para atrás, estas unidades especiales no han tenido descanso: a finales de octubre la Policía del Huila logró desactivar una bomba en el centro de Neiva y el de 6 octubre, en el municipio de Colombia, fueron asesinados tres miembros de una familia. Además, en la madrugada del pasado domingo, se pudo neutralizar otro petardo que estaba frente a una ferretería, en el mismo sector.

Según un informe de riesgo de la Defensoría del Pueblo emitido hace cuatro meses, la ‘Teofilo’, en su propósito de recuperar territorio en el departamento, “al parecer, ha modificado su estructura y mandos, y ha intensificado las amenazas e intimidaciones contra los funcionarios locales, los concejales municipales, los diputados a la Asamblea Departamental y los familiares de estos servidores públicos en los municipios de Neiva, Algeciras, Hobo, Campoalegre Gigante y Rivera (...) como una forma de retaliación” por el incremento de la fuerza pública.

Los efectos de estas acciones violentas en el Huila, un escenario natural para los grupos armados porque es un corredor que une al Cauca con Caquetá, tiene consecuencias casi irreparables. “El hecho de que los funcionarios públicos hayan restringido sus visitas a la zona rural, incrementa la condición de vulnerabilidad social y económica de sus pobladores, agrava el estado de indefensión de los campesinos por el abandono estatal, y facilita las condiciones para que la guerrilla de las Farc divulgue su ideología insurgente y sustituya la autoridad del Estado" dice la Defensoría.
 
Y continúa: "Esa segregación espacial produce estigmatización en los campesinos y trabajadores agrícolas que son señalados en las cabeceras municipales como presuntos colaboradores de la guerrilla, al decir que ellos ‘bajan’ al pueblo con el fin de comprarles remesa y medicina a la guerrilla y a realizar labores de inteligencia”.

Las autoridades ofrecieron 50 millones de pesos en recompensa por información que lleve a la captura de los responsables del incidente en Neiva, mientras se reforzará con 200 agentes policiales la seguridad en esa localidad, de acuerdo con el director de la Policía Nacional, general Oscar Naranjo.