| Foto: Guillermo Torres

POLÍTICA

Fallo del CNE fue salomónico para los azules, pero...

No se tumbó la candidatura de Marta Lucía, pero tendrían libertad los congresistas que no quieran apoyarla.

24 de abril de 2014

La decisión del Consejo Nacional Electoral sobre el pleito que mantiene enfrentados a los dirigentes del Partido Conservador se podría calificar como salomónica. El tribunal electoral no encontró razones para declarar ilegal la Convención en la que fue elegida Marta Lucía Ramírez, pero sí dejó dudas de que la votación haya sido “transparente”.

Y aunque el presidente del conservatismo, Ómar Yepes Alzate, considere que tras esta decisión todo el partido debe apoyar de forma resuelta la candidatura de Ramírez, otra cosa parece decir la realidad, pues el ala de los parlamentarios jugados por la reelección del presidente Juan Manuel Santos también encuentra en el fallo del CNE los argumentos para mantenerse en su posición. Por eso las huestes azules seguirán divididas.

la decisión exhorta al Directorio Nacional de ese partido a expedir un certificado sobre la trasparencia de la votación, ya que este no fue expedido por el Comité de Garantías de la Convención. Y sin ese requisito no se podrá obligar a los dirigentes del partido a apoyar la candidatura oficial.

Eso quiere decir que si ese documento no se expide, los llamados conservadores santistas estarían en libertad de maniobra, o por lo menos se librarían de cualquier investigación si apoyan bajo la mesa la reelección de Juan Manuel Santos.

Senadores como Carlos Barriga y Efraín Cepeda argumentaron que el Directorio Nacional debe reunirse para certificar la transparencia, pero esta instancia está dividida en torno a las candidaturas presidenciales. Eso se evidenció desde el año anterior, cuando el Directorio Nacional estuvo prácticamente fraccionado en torno a la realización de la Convención para escoger candidato presidencial.

Por eso en las toldas azules lo que se avecina es una fuerte discusión, ya que se mantienen las posturas de que en la Convención no hubo transparencia a la hora de la votación.

Y es que ese certificado será crucial no para dejar en firme la candidatura de Ramírez, pues fue legitimada por el CNE, sino para blindar de investigaciones por doble militancia a quienes decidan apoyar otra candidatura. Pues aunque los estatutos del partido obliguen a los militantes a votar por la aspiración oficial, el tribunal electoral dejó abierta la puerta a que la decisión de la Convención no sea vinculante.

Las dudas en la votación

En el fallo del magistrado Joaquín José Vives, que fue votado por unanimidad, el CNE advierte que nunca se pudo certificar si los votos registrados en la Convención, y con los que se proclamó Marta Lucía Ramírez, en efecto correspondieron a las personas habilitadas para votar y que sólo estas hayan votado. Ya que según se consignó en las declaraciones allegadas al proceso quedó demostrado que un grupo de convencionistas abandonó el recinto y que en su retiro, no todos dejaron bajo custodia los dispositivos electrónicos para la votación.

Además, en el expediente hay declaraciones que dan cuenta de que tras el desorden que se formó cuando se torpedeó la intervención de los que defendían la tesis del candidato de coalición, la empresa contratada para la logística perdió el control de las personas que entraban y salían del recinto de votación. Para el CNE quedó demostrado que fue imposible asegurar que sólo las personas habilitadas para votar eran las que se encontraban en el recinto.

Esto ha sido argumento para que el exviceministro Guillermo Reyes, quien impugnó la Convención, evalúe interponer recursos ante el Directorio Nacional, pues en su criterio la votación fue irregular.

Por eso, más allá de resolver las diferencias al interior del Partido Conservador, el fallo del CNE deja abierta la división y se esperan próximas discusiones intensas, pero ahora en el seno del directorio.